Fútbol

La batalla de Levante

El encuentro entre el conjunto local y el Real Madrid acabó, una vez ya en los vestuarios, entre golpes, insultos, puñetazos e intervención de la Policía.

Peleas, policías en los vestuarios, insultos públicos, un jugador con puntos debido a una herida y videos recopilatorios en Internet: lo sucedido a partir del Levante-Real Madrid es la confirmación de que hay partidos que duran mucho más de 90 minutos.


Durante todo el día se sucedieron las reacciones. Comenzando por los clubes interesados y continuando por algunos de los jugadores implicados en el incidente.


El encuentro del domingo abundó en la extraña y encarnizada rivalidad que viven ambos equipos en los últimos años en la Liga española de fútbol. No hay enfrentamiento entre blancos y azulgranas que no se salde con polémica, pero lo ocurrido en la victoria blanca por 2-1 el domingo fue todavía más allá, con algo parecido a una crónica de sucesos.


El duelo fue una batalla bajo el diluvio, con un campo casi impracticable por los charcos, y comenzó con Cristiano Ronaldo con la ceja abierta y bañando su cara en sangre por un codazo del duro central David Navarro.


Con divergentes opiniones sobre la intencionalidad del defensor, numerosos medios de comunicación españoles se aprestaron a mostrar por Internet los videos que forman parte del agresivo historial del jugador.


Así, Navarro fue castigado con siete meses de suspensión por agredir al argentino Nicolás Burdisso al final de un Valencia-Inter de Milán en 2007. Luego rompió la nariz a Javi Martínez cuando éste jugaba en el Athletic de Bilbao.


Y en febrero de 2011 protagonizó con Fernando Llorente, también del Athletic, una acción similar a la de Cristiano Ronaldo. "Sabemos que Navarro va a hacer daño", dijo entonces el internacional español.


Hoy se supo que Cristiano Ronaldo, cambiado en el descanso, no acudirá a la convocatoria de la selección portuguesa al tener cerrado el ojo izquierdo.


Navarro no hizo declaraciones tras el encuentro, pero el lunes, sí. Utilizó los medios oficiales del Levante para asegurar que su codazo fue "involuntario", al tiempo que afirmó que llamó a Cristiano Ronaldo para pedirle disculpas.


Durante el partido ocurrieron muchas más cosas, con polémicas arbitrales, fricciones constantes y agresiones no vistas por el árbitro, como una de Sergio Ballesteros a Xabi Alonso en la segunda parte que captaron las cámaras de televisión. Fue una más.


El enfrentamiento se prolongó en los vestuarios. Y allí es donde comienza "el otro partido".


El Levante asegura que el madridista Pepe bailó delante de su vestuario con burla y denunciaron un arreglo del partido "para que el Barcelona no se alejara del Real Madrid", según dijo el centrocampista Juanlu. "Esto ha sido un robo", agregó Pape Diop.


La versión del Real Madrid es muy diferente y "Onda Cero" relató, citando fuentes del equipo blanco, que "Ballesteros entró en su vestuario mientras cosían la ceja de Cristiano Ronaldo, agarró por el cuello a Pepe y le dio un puñetazo".


Una versión que corroboraría tras el encuentro el jugador blanco Sergio Ramos: "Aquí hay uno que siempre la quiere liar (complicar). Gente antideportiva que no sabe aceptar la derrota. Si no le gusta el fútbol y prefiere el boxeo, que se cambie".


Ballesteros negó hoy cualquier culpabilidad y dijo que "se ha prejuzgado todo antes de certificar cualquier información".


"En mi vida he agredido a nadie. Y menos a Pepe, y menos ayer. Lo que digo, después de veinte años de profesión, va a misa. Entré a ver como estaba Cristiano, pero nunca me atrevería a agredir a nadie", afirmó.


El alboroto en los vestuarios fue tal que según afirmaron testigos presenciales hasta la policía tuvo que intervenir para detener el altercado.


Los dos clubes emitieron hoy sendos comunicados, prácticamente idénticos hasta en las palabras utilizadas, para negar cualquier conducta antideportiva.


El escrito del Real Madrid se diferenció en la explícita defensa de Pepe: "El futbolista del Real Madrid tuvo siempre una actitud ejemplar en la misma línea que la del resto de sus compañeros".


En vista de la gravedad de todo lo narrado, no cabe esperar que el asunto se detenga en España. Y menos sabiendo que el fútbol para hasta el fin de semana por la jornada de selecciones.


Mientras, el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tiene ahora una "patata caliente" entre las manos. ¿Intervendrá para sancionar tras las imágenes y las declaraciones registradas?


No hay duda de que el partido se seguirá jugando durante un tiempo más.