En su primer partido en la Eurocopa

Pedro irrumpe con fuerza

El extremo de la selección española no había tenido minutos hasta el partido contra Francia, en el que fue el primer cambio de Vicente del Bosque.

Pedro, durante el partido contra Francia.
Pedro irrumpe con fuerza
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Pedro Rodríguez, extremo de la selección española, irrumpió con desborde, velocidad y fuerza en la Eurocopa 2012, en los cuartos de final contra Francia (2-0), su debut en una competición de la que se vio fuera en determinados momentos de la temporada, pero en la que ya ha demostrado su clase.


En el minuto 65, Vicente del Bosque apostó por él. Salió al campo en lugar de David Silva para dar amplitud por banda y dinamismo al fútbol de España desde el carril izquierdo. Dispuso de 29 minutos y 26 segundos sobre el césped, se movió con verticalidad por la banda zurda, se asoció bien con Jordi Alba y recorrió 3.333 metros.


Una de sus acciones terminó en penalti. Una 'bicicleta' desequilibró a Antonio Reveillere, que le derribó dentro del área. Fue la única falta que recibió en el tiempo que jugó ante Francia y una jugada que sentenció el triunfo de la 'Roja', ya que Xabi Alonso transformó la pena máxima frente a Hugo Lloris (2-0).


"Siempre lo dije: hay que tener calma y esperar. Los jugadores lo están haciendo muy bien y para eso estamos, para, cuando nos toque la oportunidad, intentar ayudar a los compañeros. Hoy ha sido así. Y muy contento", valoró el futbolista minutos después del encuentro.


"Me he encontrado bien en el campo, estamos muy bien en los entrenamientos y ahora con ganas de jugar esa semifinal", continuó Pedro, uno de los siete jugadores que no había tenido minutos hasta ahora en el conjunto dirigido por Vicente del Bosque, pero que anoche, en Donetsk contra Francia, debutó con nota en la Eurocopa.


No ha sido una temporada fácil para el extremo. Las lesiones musculares, además de una en el tobillo izquierdo, han interrumpido sus apariciones con el Barcelona, con el que ha jugado 48 duelos oficiales este curso, aunque cerró la campaña con su club a tope y con dos goles en la final de la Copa del Rey contra el Athletic.


"En momentos puntuales de la temporada me vi fuera de la Eurocopa", admitía hace dos semanas, en rueda de prensa en la localidad polaca de Gniewino. Pero Del Bosque confió en él, le incluyó entre los 23 elegidos para el torneo y fue su primer cambio contra Francia. Acertó. Lo demostró Pedro con su rendimiento.


No había jugado en toda la fase de grupos y en los entrenamientos había sido una opción para el técnico como lateral izquierdo, ya que en ese puesto sólo dispone de Jordi Alba, aunque anoche le puso de extremo, su zona natural, en la banda izquierda, en la que insistió en sus acciones frente a la defensa rival. Centró, regateó y brilló.


Fue su primer partido con la selección española desde el pasado 11 de octubre de 2011, en la victoria por 3-1 frente a Escocia en Alicante. No disputó ninguno de los nueve encuentros siguientes, seis amistosos y tres oficiales, hasta su entrada en el duelo frente a Francia. Una situación similar al Mundial de Suráfrica 2010.


También con Vicente del Bosque como seleccionador, Pedro llegó a la cita intercontinental con el papel de suplente, sólo dispuso de trece minutos en la fase de grupos, en el primer choque contra Suiza, en el que perdió por 1-0, y no apareció sobre el terreno de juego en los dos siguientes, ante Honduras y Chile.


Dos minutos frente a Portugal en los octavos de final y los quince muy completos contra Paraguay en cuartos le dieron la titularidad en las semifinales del Mundial contra Alemania. Disputó 86 minutos en la victoria sobre el conjunto germano (1-0) y 60 en la final contra Holanda (1-0). Ahora ha irrumpido de nuevo con fuerza.