LIGA DE CAMPEONES

Estreno con victoria (3-1)

El Barcelona golea al Sporting de Lisboa en su primer partido en la Liga de Campeones

El Barcelona despachó al Sporting de Portugal con dos goles a balón parado, desde el córner y el punto de penalti, y un último tanto de Xavi, ya en los minutos finales; en un ejercicio de supervivencia que le alcanzó para sumar la victoria en su estreno europeo de la temporada.


El Barcelona volvió a ofrecer una imagen titubeante donde Guardiola volvió a sorprender desde la alineación. Obvió a Sylvinho, recicló a Puyol como lateral izquierdo, puso a Keita como ancla en el centro del campo y liberó a Alves, hasta el punto de jugar con tres defensas cuando la pelota fue del Barça.


El peligro corrió a cuenta de Messi. Pese a todo, el gol volvió a llegar a balón parado de los pies de Márquez en un saque de esquina. El gol avaló el papel de los centrales. Pero como es costumbre, el tanto relajó al Barça. El Sporting se estiró, impulsado por la efervescencia de Izmailov en el volante izquierdo. Pero al equipo de Paulo Bento aún le falta cuajo para batirse de tú a tú en el Camp Nou, por más que Tonel retratase las carencias defensivas del Barça y pusiese picante al partido con el 2-1.


Sin acierto en el remate, el Samuel Eto'o se marcó desde el punto de penalti, después de que el francés Duhamel sancionase un leve empujón de Abel al propio delantero.


Para cualquier otro equipo, el partido estaría cerrado. No para el Barça, tan generoso en el despliegue ofensivo como despistado a la hora de defender las faltas laterales. Entre los centímetros de Márquez y Touré se elevó el central Tonel, el pie derecho a la altura de la cabeza de los defensores, para retratar nuevamente al Barça.


Demasiado expuesto a los vaivenes del resultado, el conjunto azulgrana se desnudó tras el gol del Sporting. Demasiado frágil, el equipo de Guardiola es incapaz de gobernar los partidos con la autoridad que se le supone y tirita en cuanto el rival se le acerca.


Tan sólo una irrupción en el área rival de Xavi, clausuró el partido. Iniesta colgó suavemente un balón al área y Xavi lo rescató entre los dos centrales, batiendo a Rui Patricio para alivio de su equipo, que alcanzó el pitido final con la lengua fuera y demasiado pendiente de la hora y del marcador.