Gestos relajados y preparados para el esfuerzo. En medio de un ambiente distendido, después de conseguir el sábado la primera victoria en Segunda, los jugadores del Huesca retomaron el trabajo en San Jorge para preparar el partido del próximo domingo (19.00) en Tenerife.

Los 25 futbolistas con los que cuenta el gaditano Antonio Calderón comparecieron en la sesión. Las principales novedades fueron la presencia de Joaquín Sorribas, por fin integrado en el trabajo del grupo, y la de Julián Vara, después del tremendo golpe en la cabeza que se llevó ante el Eibar y que le obligó a pasar una noche en el hospital de San Jorge en observación.

Sebastián Corona, que el domingo fue sustituido por Borrego, aquejado de molestias en una rodilla, también se ejercitó con intensidad, aunque prefirió retirarse antes de concluir la sesión para preservarse de cualquier sobrecarga y orientar la semana para poder estar el domingo en el Helidoro Rodríguez.

"Coro", nostalgia de tres años

Corona perteneció tres años a la disciplina del Tenerife. El sevillano (Lora del Río, 8 de julio de 1976) militó en el cuadro chicharrero entre 2002 y 2005, antes de marcharse al Murcia. Fueron años brillantes para un futbolista que disputó 106 partidos de Liga y consiguió cuatro goles.

El regreso a la isla le supone una gran ilusión. "Ya me lo perdí cuando estaba en el Murcia". Pero si no se ve al cien por cien, él es el primero que tiene claro que "habrá que dejar paso a otro compañero que sí lo esté". Corona hará todo lo posible por llegar a la cita en un estadio donde se guarda un buen recuerdo de él y en el que sospecha que tendrá "un buen recibimiento". Incluso de conseguir algún gol, "algo que no suelo hacer mucho", tendrá que celebrarlo "por respeto al Huesca, que es el club en que ahora estoy".

El Tenerife ha empezado la Liga con locura de carnaval anticipada. Ha conseguido nueve goles en tres partidos, con seis repartidos a medias entre sus delanteros Ángel y Nino. Ningún equipo tiene tanto acierto ante el gol. Sin embargo, su defensa también presenta fisuras, como delatan las siete dianas que ha encajado.

"Tienen mucho potencial arriba, lo que nos va a obligar a estar muy atentos. Nosotros tenemos que estar serios e intentar hacer nuestro partido", explicó Corona.

No habrá miedo escénico en el Heliodoro, como el propio Corona se encargaba de dejar claro ayer en la prensa tinerfeña. "Aunque somos un recién ascendido, en este vestuario también hay gente con bastante experiencia. Conocemos la categoría, el rival que vamos a visitar y el campo donde vamos a jugar", manifestaba en La Opinión.

La vuelta al cole fue dura para Sebas Corona y sus compañeros sobre la impecable hierba de San Jorge pueblo, en esa trashumancia del equipo que cada día les lleva a un terreno de juego. Calderón citó a sus chicos en El Alcoraz. Ahí los tuvo reunidos durante un buen rato antes de dirigirse al lugar de entrenamiento.

Después, la sesión se centró fundamentalmente en la posesión, presión y salida del balón realizado con partidos en medio campo. La exigencia fue máxima en un grupo en el que la competencia por entrar en una convocatoria es feroz.