SEGÚN EXPERTOS DEL GOBIERNO

El rescate del cuerpo de Calafat es inviable

El Gobierno balear había solicitado la asistencia de expertos de alto nivel del ejército para plantear la posibilidad de organizar una operación de rescate de los restos del alpinista fallecido que la han descartado por las escasas posibilidades de éxito y por el riesgo que supondría para la vida de quienes participaran en ella, según ha informado el Ejecutivo autonómico en un comunicado.

Tolo Calafat, en el campo base del Everest en 2008.
Luto por Calafat
EFE

Expertos de las Fuerzas Armadas en expediciones de alto nivel y con larga experiencia en el Himalaya han informado al Gobierno balear de la inviabilidad de organizar una expedición de rescate y repatriación de los restos del montañero mallorquín Tolo Calafat, fallecido en el Annapurna el pasado jueves.


El Gobierno balear había solicitado la asistencia de expertos de alto nivel del ejército para plantear la posibilidad de organizar una operación de rescate de los restos del alpinista fallecido que la han descartado por las escasas posibilidades de éxito y por el riesgo que supondría para la vida de quienes participaran en ella, según ha informado el Ejecutivo autonómico en un comunicado.


Amigos del montañero habían solicitado la intervención del Gobierno balear para estudiar cómo rescatar el cadáver de Tolo Calafat, por lo que la Dirección General de Emergencia contactó con las fuerzas del ejército español ubicadas en Afganistán para estudiar las posibilidades.


Según el Gobierno balear, la Brigada de Infantería de Marina sólo dispone de un pequeño grupo de personas con misiones genéricas y sin formación ni recursos materiales específicos de alta montaña en dicho país y constituye la dotación más próxima al lugar donde falleció el mallorquín.


Tampoco hay unidades de la Jefatura de Tropas de Montaña próximas al Annapurna.


Los expertos de la Fuerzas Armadas en materia de montaña han desaconsejado la operación de rescate, incluso si fuera a menor altitud del lugar donde se estima que se encontraría el cuerpo de Calafat.


Según dichos especialistas, el Annapurna es una montaña complicada por estar afectada por aludes de hielo y nieve, por lo que organizar una expedición sería largo, costoso, de elevado riesgo para las vidas de los participantes y con pocas probabilidades de éxito. El porcentaje de probabilidad de que el cuerpo no fuera hallado es "altísimo", según el Gobierno balear.


Calafat perdió la vida en el descenso del Annapurna después de coronar el martes este pico del Himalaya, según confirmaron el jueves sus compañeros de expedición Juanito Oiarzabal y Carlos Pauner, cuando le fallaron las fuerzas durante el descenso y se separó del grupo.


El mallorquín paso una noche al raso acompañado de un sherpa que al día siguiente decidió bajar y enviar a otro guía en su búsqueda, con oxígeno, medicamentos y alimentos, pero éste último no logró localizarle, por lo que fue dado por fallecido el jueves en torno a las 7.30 horas, cuando se suspendió su búsqueda.


Tolo Calafat Marcus (Palma, 1970), casado y con dos hijos de ocho y un año, era un experimentado montañero para quien el Annapurna era su quinto ocho mil.