REAL ZARAGOZA 3-VILLARREAL 3

Adiós a la liga con un empate en casa

El Villarreal no pudo pasar del empate en Zaragoza y frustró así las exiguas posibilidades que tenía de haber logrado un puesto para la Liga Europa la próxima temporada, en un encuentro en el que fue superado claramente por el equipo local en la primera mitad pero en el que supo reaccionar tras el descanso.

Pulido anota un gol
Adiós a la liga con un empate en casa
TONI GALÁN/A PHOTO AGENCY

El equipo aragonés, liberado del peso de luchar con la espada de Damocles sobre su cabeza durante toda la temporada, se soltó el pelo en el primer periodo donde fue muy superior a un rival agarrotado y que encajó demasiado pronto el primer tanto.


Incluso pudo haber logrado un marcador más abultado que el 3-1 con el que finalizaron los primeros 45 minutos, pero tras el tiempo de descanso se relajó en exceso ante un oponente herido en su orgullo y que sacó a relucir sus virtudes para intentar lograr el milagro de ganar y que el Getafe perdiera, algo, esto último que no ocurrió.


El conjunto maño, sin la presión que suponían la necesidad de los puntos en juego, salió mucho más centrado en el juego que su rival que, curiosamente, sí que tenía mucho en juego, y a los tres minutos ya pudo haber inaugurado el marcador tras un garrafal error del central 'Gonzalo' Rodríguez, pero a Adrián Colunga optó por un regate en lugar de rematar, que hubiera sido lo más sencillo, y perdió el esférico.


Esta jugada fue el preludio del primer tanto local que llegó en el minuto 4 en un saque de falta del portugués 'Eliseu' Pereira en las inmediaciones del área y que se coló por la escuadra de la meta del conjunto amarillo.


El Villarreal acusó el gol y durante los siguientes minutos deambuló por el campo ante un Zaragoza más ambicioso y que pudo haber aumentado su ventaja en el marcador, aunque primero Colunga no llegó a un centro del serbio Ivan Obradovic y después el potente remate de Rubén Martín Pulido lo rechazó con muchos apuros Diego López.


El conjunto de José Aurelio Gay era dueño y señor del juego pero el segundo tanto llegó, en el minuto 29, tras otro error garrafal de la zaga castellonense, en este caso de Diego Godín, que perdió el balón ante Colunga, que en esta ocasión sí resolvió bien.


Solo cinco minutos después, y con Diego García salvando otro tanto previamente, llegó el tercero de Pulido, tras una gran dejada de cabeza del central checo Jiri Jarosik.


A partir de ahí, y con todo perdido, el conjunto villarrealense apareció por primera vez con peligro sobre la meta local con sendos remate de Giuseppe Rossi en los minutos 36 y 38 que el meta Roberto Jiménez rechazó con muchos reflejos.


Sin embargo, el meta cedido por el Atlético de Madrid no pudo con el remate de Santi Cazorla, dos minutos después, que acortaba distancias y daba alguna esperanza al equipo de Juan Carlos Garrido.


El Villarreal salió en la segunda mitad con otro talante sabiendo que se lo tenía que jugar todo, más centrado y arriesgando también más que en el primer periodo.


Fruto de ello llegó el 3-2 en el minuto 55, obra también de Cazorla, que ponía un rayo de esperanza en el intento de lograr la victoria.


El Zaragoza puso haber puesto el 4-2 con un remate de Gabriel Fernández que se estrelló en el larguero en el minuto 75 y un minuto más tarde fue Rossi el que puso las tablas en el marcador en un contragolpe.


El partido se partió y el balón viajaba con rapidez de área a área pero al final ninguno de los dos equipos acabó por decantar el partido a su favor.