"Si te la juegas para clasificarte para una competición europea o una final y fallas, no pasa nada. Aquí no. Es el descenso. Y si no ganas te vas abajo. Será el partido más importante de mi carrera". Juanfran ilustró el callejón sombrío en que se encuentra el Real Zaragoza. Solo la victoria abre una salida en un partido de trascendencia histórica y que la plantilla asume como el domingo de su vida, el día en que encaran el compromiso más angustioso y crucial de sus trayectorias. Las palabras de Juanfran, hombre que ha recorrido la dulce experiencia de la Champions, que ha jugado finales o que ha pisado el césped de un Mundial, deben añadirse a las formuladas durante la semana por Ayala, otro hombre con una carrera de dimensiones tolstoianas.

Celades tampoco rebajó ni un grado la relevancia del partido: "Sabemos lo que nos jugamos. Poco se puede decir cuando afrontamos el partido más importante de los últimos años en el Real Zaragoza. Después del partido frente al Madrid, la decepción era enorme porque vimos desaprovechada una gran oportunidad. Pero ahora dependemos de nosotros mismos y llegar así a la última jornada es lo mejor que tenemos, la mejor noticia para ser optimistas. Si ganamos, seguiremos en Primera".

Cuando el partido de Mallorca anuncia una sobrecarga de tensión y estómagos electrificados por los nervios, tanto Celades como Juanfran no esquivan responsabilidades. Ambos consideran un honor defender la permanencia con una única bala en la recámara. "Aunque es una situación que no elegiría, sinceramente me encanta jugar este tipo de partidos, son situaciones de privilegiado. Partidos de mucha tensión, pero muy motivadores. Si sale bien, recordaremos siempre este partido como yo recuerdo algunos de mi carrera, como la final de Champions con el Madrid o las finales de Copa del Rey. De verdad, jugar estos partidos, estar ahí representando a tanta gente, es una responsabilidad, pero también una motivación", explicó Celades.

Por similar hilo se movió Juanfran, que sustituirá al sancionado Javier Paredes en el lateral izquierdo: "Me siento afortunado de jugar en Mallorca. Los jugadores llevamos muy adentro esta responsabilidad. Yo personalmente, estoy deseoso de que llegue ya el partido".

El lateral valenciano ofreció la lectura que debe realizarse del nefasto bagaje del Real Zaragoza en sus partidos fuera de La Romareda: "Tenemos todo en contra, la estadística como visitante, el buen momento del Mallorca... Pero todo eso nos debe servir para motivarnos y responsabilizarnos".

Similar discurso enunció Celades: "Está claro que las estadísticas están ahí. Pero esto es un partido. No hay más, es la última oportunidad y dependemos de nosotros mismos. No hay otra. Sabemos que si perdemos, se acabó. Por lo tanto, por nuestra cabeza no pasa la mala racha fuera. Solo pensamos en ganar. Sí o sí."