El CD La Muela está inmerso desde ayer en un nuevo conflicto de índole económica que tiene su raíz en la plantilla que el año pasado, en la temporada 2009-10, logró el histórico ascenso a Segunda División B. Diecinueve futbolistas de aquel equipo y dos técnicos (el entonces entrenador, Emilio Larraz, y el preparador de porteros, César Láinez) han solicitado al club por vía legal el pago de una deuda global acumulada que alcanza los 68.555 euros en diferentes partidas personales.

Estos 21 afectados, a través de un documento firmado por el abogado Raimundo Moreno, instaron ayer a la directiva del CD La Muela a que, en un plazo no superior a tres días, adopte las medidas oportunas para alcanzar un acuerdo amistoso que permita el cobro de estas cantidades que oscilan entre los 1.426 euros la más baja y 5.640 la más alta. De lo contrario, se advierte por parte del letrado, la plantilla y técnicos del equipo de la temporada pasada se verá obligada a emprender las oportunas acciones legales en defensa de sus intereses.

Después de muchos meses de promesas inclumplidas, la espoleta que ha derivado en esta iniciativa legal definitiva para reclamar estas deudas se produjo anteayer miércoles. Cuatro de los afectados acudieron a la oficina de Cajalón de La Muela a cobrar unos pagarés librados en su día para retirar con fecha 1 de diciembre. Pese a que en la cuenta correspondiente existían fondos, ninguno de ellos vio satisfecho el reintegro del dinero correspondiente al tener los empleados de la entidad financiera la orden de no pagar a futbolistas pertenecientes al equipo del curso anterior, indicación que en dicha oficina cumplieron a rajatabla.

Entre los 21 denunciantes solo figuran cuatro futbolistas que continúan este año perteneciendo a la plantilla del CD La Muela: Miguel Ángel Moya, Iván Martínez, Sergio Bruna y Miguel Lario. El resto, 15 jugadores, el entrenador Emilio Larraz y el preparador de porteros César Láinez, están fuera del club desde el pasado 30 de junio. Todos ellos, tras consumar el ascenso de categoría en una fase de promoción en la que eliminaron al Marino de Tenerife, al Constancia de Inca y al Cerceda gallego, buscaron otros destinos (solo el portero Rubén Falcón había abandonado la entidad con anterioridad, en enero, para irse al Ciudad de Lorquí murciano de superior categoría).

Los problemas se acumulan

Esta denuncia heredada del año pasado se acumula a los conflictos de orden financiero que viene sufriendo el equipo directivo del CD La Muela con los componentes de la actual plantilla, la que desde el verano, con infinidad de caras nuevas, es protagonista del histórico debut del equipo gualdinegro en Segunda B.

Hace tres semanas, los jugadores provocaron varias reuniones para solicitar el pago de sus emolumentos y amenazaron con no ir a jugar a Éibar. La directiva (que no es la misma del año pasado) pidió públicamente ayudas a las instituciones. A estas alturas, la actual plantilla solo han cobrado las mensualidades de agosto y septiembre y se les deben las de octubre y noviembre.