EL PRÓXIMO RIVAL

El Málaga prepara una olla a presión

La afición del equipo andaluz, encendida tras los últimos arbitrajes, quiere calentar La Rosaleda para el partido contra el Real Zaragoza.

El defensa del Málaga Demichelis comete un penalti sobre Mata en el último partido de Liga.
El Málaga prepara una olla a presión
J. JORDáN/AFP

El último arbitraje de Rubinos Pérez en el estadio de Mestalla, donde el Málaga perdió contra el Valencia (4-3) tras un partido muy polémico en el que los blanquiazules acabaron con nueve jugadores, ha encendido a la afición del equipo andaluz, que está preparando movilizaciones de cara al partido del sábado (18.00) contra el Real Zaragoza. Los malagueños quieren convertir La Rosaleda en una olla a presión para intimidar tanto a los colegiados, a los que culpan de haberles privado de varios puntos vitales, como al conjunto de Javier Aguirre, un rival directo en la lucha por la permanencia.


Y es que el colegiado madrileño fue determinante en el resultado final del partido ante el Valencia, un encuentro que el Málaga acabó con nueve futbolistas tras las expulsiones de Demichelis y de Hélder Rosario. El central argentino vio la roja directa tras cometer un penalti en una jugada que debió ser invalidada por fuera de juego de Mata. Por su parte, Hélder fue expulsado tras ser acusado por el árbitro -así lo recogió en el acta- de hacerle un corte de mangas al juez de línea. Sin embargo, el Comité de Competición dejó ayer sin efecto la cartulina roja, pues las imágenes del encuentro demostraban que el portugués no realizó ese gesto en ningún momento y podrá jugar ante el Real Zaragoza.


Pero las acusaciones del entorno malaguista hacia Rubinos Pérez, que también expulsó a Pellegrini cuando protestó una falta, van más allá del mero mal arbitraje. Y es que, según confirmaron varios jugadores del equipo andaluz, entre ellos Sergio Asenjo, el colegiado madrileño abusó de su poder y se mofó del portero blanquiazul. Al parecer, cuando Asenjo fue a protestar una falta inexistente en el gol de Banega, Rubinos no dudó en sacarle la tarjeta y añadir un comentario que no ha sentado muy bien en el club andaluz. «Chaval, aprende a salir, que eres muy malo», dijo el árbitro, según afirman desde el entorno del Málaga.


Incluso la red de redes se ha convertido en una plataforma para calibrar las sensaciones del club de la Costa del Sol. En Internet, los aficionados del conjunto valenciano se burlan de lo ocurrido y recomiendan al jeque árabe, Abdullah Bin Nasser Al-Thani, que «debe fichar un árbitro». Las bromas de los levantinos, unidas a su enfado por las últimas actuaciones arbitrales -también protestan por el gol de Javi Martínez en el partido contra el Atlethic, que nació de una falta «injusta» señalada en el tiempo añadido y que supuso el empate para los vascos-, han hecho que la afición del Málaga está preparando movilizaciones para el partido contra el Real Zaragoza. Una de las peñas tiene previsto lanzar globos negros en La Rosaleda y se ha convocando una concentración unas horas antes del partido.

 

Siete partidos de sanción

Además de la dolorosa derrota frente al Valencia, el partido de Mestalla ha dejado mermada la plantilla del Málaga, cuya sanción total suma siete partidos. Pellegrini, que ha sido sancionado con un partido, no podrá sentarse el sábado en el banquillo, igual que Demichelis, que se también se perderá el choque. Pero los más perjudicados han sido Weligton, que se perderá dos encuentros por insultar al árbitro cuando pitó el final, y Apoño, que no podrá jugar los próximos tres encuentros de su equipo (dos por descalificar a Rubinos y otro más por acumulación de tarjetas).