SEGUNDA DIVISIÓN B

El Huesca sigue cuesta abajo

El equipo azulgrana prolonga su mala racha y ayer empató ante un débil CD Logroñés. Los de Onésimo dilapidan su ventaja y se complican su presencia en los "play off".

Entre la cercanía del objetivo y la incertidumbre del bajón de resultados. El Huesca se ha empeñado en retrasar su pase al "play off" y sigue dilapidando la enorme renta que poseía con sus perseguidores hasta el punto de que ahora misma el quinto clasificado está a solo tres puntos más el 'golaverage'. Ayer empató a cero con un débil CD Logroñés que llegó en cuadro a El Alcoraz, ya que por lesiones y sanciones dispuso simplemente de un suplente. Faltó suerte y falló el árbitro con un gol mal anulado a Edu Roldán en el tiempo añadido.


Pero en esta espiral peligrosa en la que se ha instaurado este Huesca nada sale. Sin reproches de dejadez ni de apuesta ofensiva, el gol no llegó pese a ser el único equipo que lo intentó durante los 90 minutos. Los riojanos, sabedores de sus limitaciones, se cerraron y dosificaron sus fuerzas con los once titanes sobre el césped, que aguantaron con la puerta sellada.


Los datos son objetivos pero interpretables como uno quiera ver la botella. Medio llena, pues con los actuales 61 puntos y el calendario que le resta -Guadalajara, Bilbao Athletic y Osasuna B-, la clasificación para la fase de ascenso debe ser inmediata. Medio vacía, por el evidente descenso del equipo en el nivel de juego, de resultados (no ha ganado en los últimos seis partidos) y de físico, con el bajón que han experimentado jugadores clave.


Sin acierto


Onésimo, que recibió protestas desde la grada, colocó a Sastre en la posición del sancionado Sorribas y apostó por el 4-1-4-1. El guión preestablecido tenía buena pinta y tras los primeros minutos todo parecía ir por buen cauce. El Huesca dominaba y tocaba hasta hartarse, pero faltaba profundidad. Enfrente tenía un muro.


Además, el portero Emil, que fue el mejor con diferencia de los riojanos, desbarató las mejores ocasiones del Huesca en la primera mitad.


Tras el descanso prosiguió el agobio local, pero no hubo acierto de cara al gol. El último cartucho fue un balón colgado al área que Roldán remató a la red, pero el árbitro señaló fuera de juego.