PRIMERA DIVISIÓN

El fin de semana más esperado

La prudencia del Barcelona y la esperanza del Madrid se citan en la última jornada.

Con prudencia en Barcelona. Con esperanza en Madrid. Así aguardan los dos aspirantes al título de la Primera División, la Liga española, la llegada de la última jornada, que decidirá quién ríe y quién llora.


Mañana se definirá quién es el campeón después de una temporada extenuante, en la que ni Barcelona ni Real Madrid cedieron, aunque el actual campeón, con un punto más, tiene la enorme ventaja de depender de sí mismo. De hecho, sería una enorme sorpresa que el Fútbol Club Barcelona perdiera el título, puesto que le basta con hacer lo mismo que consiga el Real Madrid. Aunque cosas más complicadas se han visto en fútbol, y a ello apelan los blancos.


El Barcelona asume su papel de favorito. Recibe en casa al Valladolid, que se juega el descenso, y una victoria le aseguraría el título sin mirar lo que haga el Real Madrid en su visita al Málaga. Lo peligroso para el actual campeón es que durante toda la semana se ha hablado más de los posibles fichajes para la próxima temporada (entre ellos el valencianista David Villa y el centrocampista del Arsenal Cesc Fábregas) que del encuentro de mañana. Justo lo que menos le gusta a Pep Guardiola, su técnico.


Es de suponer que el entrenador catalán aleccionó correctamente a sus jugadores sobre la necesidad de darlo todo en el último encuentro de la temporada. Al menos, eso se desprende de los mensajes que están transmitiendo los futbolistas. "A día de hoy, lo realmente importante es pensar en el domingo. Lo importante es que dependemos de nosotros mismos, eso no tiene precio, aunque ellos (el Valladolid) se juegan la vida y tendrán una intensidad increíble", afirmó ayer el centrocampista blaugrana Andrés Iniesta.


Por su parte, el Real Madrid lo hizo todo para llegar con opciones a la última jornada. Pero no le ha servido, de momento, para situarse por encima del Barcelona, cuyo punto de ventaja es valiosísimo, y más sabiendo que también quedará por delante en caso de empate a puntos gracias a su ventaja esta temporada en los enfrentamientos con el Real Madrid (dos triunfos frente a los blancos, tanto en el partido de ida como en el de vuelta). Pero los jugadores madridistas, acostumbrados a vivir varios 'milagros' en los últimos años, no pierden la esperanza, por más que el empeño suene a aquello del "más difícil todavía".


"Los dos puntos negros, que fueron las eliminaciones de la Copa del Rey y de la Champions, tapan un poco la increíble campaña liguera que estamos haciendo. Pero aún puede cambiar todo, en sólo 48 horas0", afirmó ayer el arquero Iker Casillas, uno de los capitanes. Y añadió: "En Málaga tenemos que pensar solo en nuestro partido, porque lo primero que tenemos que hacer es ganar nosotros. Todo puede pasar, que el Barça falle o que fallemos nosotros, porque tanto el Valladolid como el Málaga se juegan mucho".


La casualidad quiso que tanto Barcelona como Real Madrid disputaran la última jornada ante equipos que se juegan la permanencia en 90 minutos, rivales que se lo dejarán todo.