REAL ZARAGOZA

El efecto dominó

Las horas de Diego Milito en el Real Zaragoza están definitivamente contadas. La recta final del mercado de verano y la esperada y deseada catarata de fichajes de alto calibre entre equipos de primer nivel en Europa está a punto de dejar un hueco adecuado para que el ariete argentino del cuadro zaragozano abandone la Segunda División y retorne a la elite antes del 1 de septiembre.


El Valencia le espera para sustituir a David Villa -otro ex zaragocista- si, como parece, el Guaje se marcha de inmediato al Real Madrid para ocupar la vacante que va a dejar ya mismo el brasileño Robinho, que se va rumbo al Chelsea.


No importa que el vicepresidente deportivo del cuadro valencianista, Fernando Gómez Colomer, afirmase ayer que maneja una lista de "ocho o diez posibles fichajes para suplir la posible marcha de Villa" y que únicamente hablase de Huntelaar, el internacional holandés del Ajax de Amsterdam, durante la rueda de prensa de presentación del portero brasileño Renán. La realidad es que, aunque Huntelaar gusta mucho a Emery, el entrenador 'ché', el Valencia sabe que es imposible sacarle del Ajax porque Marco Van Basten, el técnico de los rojiblancos neerlandeses, ha amenazado a su presidente afirmando públicamente que "si Huntelaar se va, yo me voy de la mano con él".


Es Diego Milito el mejor colocado de ese hipotético elenco de ocho piezas escrutadas por el responsable deportivo valencianista y, si el efecto dominó lleva el orden previsto en las próximas horas -o fechas-, el zaragocista acabará vistiendo la camiseta del Valencia.


Hace días que varios agentes e intermediarios argentinos están en España negociando, entre otras, la operación salida de Milito del Real Zaragoza. No solo Adrián Faija llegó aquí el pasado lunes, día 18. También Gustavo Mascardi y Hugo Buitrago aterrizaron en Madrid recientemente. Encontrar una oferta aceptable por Diego para evitar que tenga que jugar en Segunda era tarea urgentísima y, por fin, está a punto de fraguar.


Agapito Iglesias, como se encargó de recordar el mayor de los hermanos Milito en Galicia hace 15 días, está atado por la promesa verbal y moral que hizo a Diego el año pasado: dejarle salir este verano hacia un club de mayor enjundia que el Zaragoza en busca de su último gran contrato, a punto ya de cumplir los 30 años. Agapito logró que el internacional albiceleste aguantase una temporada más en el Zaragoza (la pasada) a cambio de un sustancial aumento de sueldo. Pero ahora, y mucho más tras el inesperado descenso a Segunda, no puede intentar retenerlo dados estos precedentes.


Después de tres años goleando con la camiseta blanquilla, Diego Milito comenzará en breve una nueva andadura futbolística en España vistiéndose de valencianista. Será una vez que Robinho parta hacia Londres y Villa hacia Chamartín. Y, si no surgen imprevistos de última hora que den al traste con estas operaciones ya muy avanzadas en Stamford Bridge y el Santiago Bernabéu, la comunicación oficial llegará antes del viernes.