Con la mente puesta en la próxima temporada del CAI Zaragoza en la ACB, se había hablado ya de varios jugadores que interesan y de los nuevos retos a afrontar, pero hasta ahora nadie había abierto la boca con respecto al futuro del entrenador José Luis Abós. Finalmente, el club ha decidido que le ofrecerá la renovación al técnico zaragozano, puesto que ha cumplido sus objetivos deportivos tanto esta campaña como la anterior. De esta manera, y si Abós acepta los términos de ese nuevo contrato, el aragonés seguirá al frente del banquillo del CAI, al menos, un año más.

Habitualmente, el orden a la hora de tomar este tipo de decisiones es importante. Porque decidir por dónde va a ir la próxima plantilla sin tener asegurados a quienes la van a confeccionar no es demasiado lógico. Pero actualmente el futuro rojillo va tomando forma. Si hace unos días era el presidente Reynaldo Benito el que aseguraba que «el director deportivo tiene contrato, porque tenía tres años», ayer los dirigentes de la entidad establecieron que le ofrecerán la renovación al actual entrenador, a un José Luis Abós bastante discutido por los aficionados, pero cuyos resultados deportivos son indiscutibles.

De esta manera, el técnico, siempre que acepte esa propuesta, podrá respirar tranquilo tras una campaña en la que a pesar de lograr con solvencia la salvación, tuvo que soportar las informaciones que acercaban al aragonés Sito Alonso a su puesto, y, en el tramo final de la temporada, superar o convivir con sus discrepancias con el director deportivo Willy Villar, con el que volvería a formar tándem el año que viene.

Abós -si acepta la renovación- seguirá cumpliendo sus sueños en el club de su ciudad. Ya cuando llegó al CAI reconoció que siempre había querido dirigir al equipo rojillo y ahora tiene la oportunidad de seguir haciéndolo en la elite del baloncesto español por segundo año consecutivo. En cuanto a los resultados nadie puede echarle nada en cara. Aterrizó en Zaragoza para ascender a la primera al conjunto aragonés y lo consiguió con cierta comodidad. Esta temporada tenía el reto de mantener a los rojillos en la ACB y no sólo lo ha alcanzado mucho antes de acabar la fase regular sino que todavía mantiene opciones de meter al conjunto en el 'play off' por el título.

Todos esos logros avalan al técnico, que recibirá próximamente esa oferta de renovación. Y es que los mandatarios de la entidad rojilla consideran que se ha ganado esa opción con sus resultados y mantienen su confianza en él.

Otra cosa bien distinta es su capacidad para dirigir una plantilla y un grupo como el del CAI o los aspectos tácticos que aplica en sus partidos. Ahí es donde más críticas ha recibido el entrenador zaragozano.

El núcleo duro del vestuario no está de su lado y Abós tampoco ha sabido llevar de la mano a sus jugadores importantes. Sólo mediante expedientes, feos gestos y cambios incomprensibles ha querido demostrar a sus hombres que él mandaba en el equipo. Al final le ha salido bien.

Además, hasta los seguidores rojillos, buenos conocedores del juego, han mostrado abiertamente sus críticas y hasta su rechazo al inquilino del banquillo zaragozano. Los cambios de quien mejor está sobre la cancha, el reparto de minutos o su 'lentitud' a la hora de pedir tiempo muerto cuando el partido se podía escapar han sido algunos de los motivos que han encrespado a la marea roja.

El grupo, al margen de todo

Pero lejos de esas situaciones puntuales, aunque reales, los dirigentes del CAI creen que Abós puede seguir sumando para este proyecto y por eso apostarán de nuevo por él para la campaña que viene. Pero esta temporada aún no ha terminado y el equipo sigue trabajando, como ayer por la tarde, para preparar el próximo duelo. Eso sí, al margen de todas estas informaciones referentes a las renovaciones de unos o de otros.