El burgalés Juan Carlos Higuero refrendó su hegemonía nacional en el medio fondo con una victoria sin oposición en los 3.000 metros que clausuró la reunión de Zaragoza en pista cubierta, en la que Jackson Quiñónez y Felipe Vivancos resucitaron su vieja rivalidad en vallas.

Javier Carriqueo hizo labores de liebre en los dos primeros kilómetros, y a esas alturas de carrera sólo Higuero había sido capaz de seguirle. El burgalés recorrió en solitario las cinco últimas vueltas a la pista para vencer en 7:53.05 mientras por detrás Arturo Casado batía en un apretado esprint a Penti.

Felipe Vivancos dio muestras, en la carrera de 60 metros vallas, de estar en buena forma pero una vez más Jackson Quiñónez le arrebató el triunfo en los últimos metros. Ambos acreditaron el mismo tiempo (7.63) pero el atleta del Barcelona metió el pecho por delante. En la carrera femenina de vallas, Glory Alozie no tuvo oposición: venció con un tiempo discreto de 8.31.

En 800 metros, la baja de Manuel Olmedo ofreció al joven Luis Alberto Marco la ocasión de batir al plusmarquista español, Antonio Reina, y no la desaprovechó. Una vez retirada la liebre, Marco tomó la cabeza y no la dejó hasta cruzar la meta vencedor por delante de Reina.

Mayte Martínez, bronce en 800 en los Mundiales de Osaka, prefirió la distancia de 1.500 metros, en la que sólo encontró resistencia en la aragonesa Isabel Macías, a quien cedió la delantera para batirla en el esprint.

Manuel Martínez, capitán de la selección española, logró una victoria "in extremis" en peso sobre Borja Vivas con un tiro de 19,56 metros en la última ronda, seis centímetros más que el malagueño, que en su penúltimo lanzamiento había logrado una marca de 20,50, la mejor de su carrera.

En altura, Ruth Beitia no mejoró su marca de año (1,98), aunque logró un estimable salto de 1,96 antes de fallar en los dos metros.