El Barça recela del Stuttgart

Cuando el Barça supo el 18 de diciembre que el Stuttgart sería su rival en octavos de final de la Liga de Campeones (20.45, TVE-1), todos se frotaron las manos porque el equipo alemán sólo había ganado dos encuentros en la Bundesliga y ocupaba la 15º plaza. Dos meses después no se puede decir que se haya transformado en una escuadra temible, pero su recuperación sí obliga a extremar las precauciones. Christian Gross, ex del Basilea, sustituyó en el banquillo a Markus Babbel unos días antes de aquel sorteo para meter al Stuttgart en octavos y dotarle de una personalidad que le ha permitido ascender a la novena posición, con sólo una derrota desde entonces.

La suerte para el Barça es que está avisado tras los malos resultados de los representantes españoles en Europa la pasada semana. Madrid y Valencia cayeron en Lyon y Brujas, respectivamente, mientras que Atlético, Villarreal y Athletic no pasaron del empate en casa frente a Galatasaray, Wolfsburgo y Anderlecht, por el mismo orden. El Barça, por lo tanto, tiene la oportunidad de salvar el honor de la Liga, a la espera de lo que haga mañana el Sevilla en Moscú.

La experiencia reciente, además, también aconseja prudencia. La pasada temporada el Barça hizo su peor partido en la Liga de Campeones en la ida de los octavos de final en Lyon, donde un gol de Henry significó un 1-1 milagroso tras la avalancha de ocasiones locales. La vuelta ya fue otra cosa, pero ayer algunos todavía recordaban el susto. Por todo eso, y también porque la imagen reciente del Barça no está siendo la habitual, ni el 4-0 ante el Racing fue convincente, Pep Guardiola ha convocado a dos de sus lesionados, Alves y Xavi, por si pudiera recuperarlos a última hora. Sólo se quedaron en Barcelona Abidal y Keita. De todas formas, no se espera que haya demasiados cambios en el once respecto al del sábado.

Ibrahimovic por Bojan

Sí entrará Ibrahimovic por Bojan, recuperado de su hinchazón en el tobillo, mientras que Puyol no tendrá problemas para jugar pese al golpe que recibió en el pómulo ante los cántabros. Messi, que habló ayer en Stuttgart, reconoció que el equipo no está tan fino como antaño: "No estamos haciendo el fútbol que solemos hacer habitualmente, pero tampoco tenemos que volvernos locos por dos partidos malos. Tenemos que hacer lo de siempre, tener la pelota y jugar rápido", explicó.

En el Stuttgart aguardan al Barça con ganas. Tiene jugadores con cuentas pendientes. Hleb, cedido por el Barça tras una temporada como azulgrana desafortunada en la que se atrevió a criticar a Guardiola, no descartó dar la campanada: "Será muy difícil, pero una sorpresa es posible".

Y el portero alemán Lehmann, quien siempre se quejó de la derrota en 2006 en la final de París ante el Barça cuando jugaba en el Arsenal, quiere venganza. Gross tiene la baja del lateral Boka, la duda del 'tocado' Khedira y mantiene una incógnita en ataque: el rumano Marica, habitual titular, o Cacau, que le suplió el pasado sábado en Colonia para marcar cuatro goles.