ATLETISMO

Ejemplos de superación

Carmen, una mujer que venció al cáncer, ya ha reunido a 50.000 corredoras en toda España.

Carmen, la mujer que ha conseguido reunir a más de 50.000 corredoras, en una de las pruebas.
Ejemplos de superación
HERALDO

Carmen nació en Tenerife hace 42 años, aunque ha asado casi toda su vida en Madrid. Está casada, es madre de tres hijos y ha superado el cáncer de mama en dos ocasiones. En 1999 se le diagnosticó por primera vez esta enfermedad, por lo que fue operada y sometida a varias sesiones de quimioterapia. Dos años después, le detectaron otro cáncer de mama, del que también se recuperó.


Ahora, casi diez años después, Carmen piensa que casi nada es imposible. Ni siquiera reunir a 50.000 corredoras para luchar contra una enfermedad que vivió en sus propias carnes y que sigue afectando a 16.500 personas cada año. Este año, Carmen ya ha participado en las ediciones de la Carrera de la Mujer-Central Lechera Asturiana de ocho ciudades diferentes, y este domingo llegará a la última, la de Zaragoza, con su reto cumplido: si conseguía llegar a esa cifra al finalizar las nueve carreras del circuito, Buckler 0,0 realizaría una donación de 50.000 euros para apoyo psicológico en el tratamiento del cáncer de mama.


Aunque ya lo superó en Barcelona, Carmen llega a la capital aragonesa -donde recibirá un homenaje y el prometido cheque- con la ilusión de haber cumplido su objetivo y con ganas de demostrar que ha superado el reto con creces. Junto a ella, alrededor de 3.500 mujeres recorrerán los cinco kilómetros de una carrera en la que cada participante es un ejemplo de superación. "Aunque el objetivo de reunir a 50.000 mujeres en las nueve carreras ya está cumplido, esta carrera es igual o más importante que las demás. Tenemos que demostrar que no lo hemos superado de casualidad", explica Carmen, quien cree que lo importante es que cada corredora participe en la medida de sus posibilidades. "Muchas señoras mayores recorren los cinco kilómetros andando, otras lo hacen empujando el carrito de sus hijos, e incluso hay hombres que corren sin dorsal, solo para apoyar a sus mujeres", asegura esta atleta 'accidental'.


"Yo nunca había hecho deporte, pero cuando me propusieron este reto no dudé en aceptarlo. Tan solo unos meses después, me he demostrado que con esfuerzo y afán de superación se puede lograr casi cualquier cosa", reconoce Carmen, que pretende extrapolar este ejemplo a la lucha contra el cáncer.


"En una carrera, una mujer me dijo que en la pasada edición había corrido solo para apoyar la causa. Este año tuvo que participar con un pañuelo en la cabeza", explica. "Entonces comprendí que el mensaje no es solo que cada año más de 16.000 mujeres se enfrentan al cáncer de mama, sino que casi todas estamos aquí para contarlo", sentencia Carmen.