BALONMANO

Egia, cita cumbre para el CAI Aragón

El conjunto naranja disputa hoy en San Sebastián la semifinal de uno de los torneos más prestigiosos del verano ante el Ademar.

Avanza el verano y la pretemporada. La llegada del Torneo de Egia en Sebastián nos indica la proximidad del inicio liguero. Es un torneo, sí; pero no el típico bolo veraniego con visita a una localidad en fiestas, niños peloteando en el descanso y entrega del trofeo al equipo ganador acompañado de un besito de la reina y las damas de honor a los capitanes. No, Egia es otra cosa. En un pabellón pequeñito de Donosti se juega un torneo grande, uno de los mejores cuadrangulares de agosto. Abrirán el cartel hoy a las 18.00 el Arrate de Éibar y el Amaya Sport Pamplona, el San Antonio de toda la vida. A las 20.00 cerrarán la primera jornada el Reale Ademar León y el CAI Aragón.


Egia siempre ha reunido a los mejores conjuntos del norte. Lamentablemente, plazas norteñas de tronío en el balonmano hispano y europeo, como Santander o Irún, han desaparecido de la elite. Un día ya lejano, Teka y Elgorriaga gobernaron el mundo. Hoy, ni militan en la Asobal. El desplome económico de los clubes del norte no queda aquí. Éibar sobrevive a duras penas en la División de Honor, y en Pamplona los tiempos de gloria desaparecieron con el adiós de la cementera Portland.


La primera semifinal de Egia representa una cita con la nostalgia, con dos clubes en recesión, con dos históricos que aguantan sostenidos sobre su amor al balonmano. El probable ganador saldrá de la segunda semifinal. El Ademar, a pesar del tijeretazo de las ayudas institucionales, sigue siendo el Ademar, una sensacional plantilla. Además, los leoneses conceden una relevancia considerable a la competición. Lo subrayó el técnico Jordi Ribera antes de viajar a Donosti. "Egia es el test definitivo y quizá el más real por la cercanía con el primer objetivo, que es lograr el pase para la Liga de Campeones en el torneo que jugamos del 3 al 5 de septiembre próximo en Karlsruhe (Alemania)", reiteró Ribera.


Enfrente aparecerá un CAI Aragón reivindicativo. El cuerpo técnico naranja ha diseñado un exigente calendario de pretemporada. El objetivo reside en llegar en óptimas condiciones al inicio liguero, fijado para el día 10 de septiembre en Granollers.


Exigente pretemporada

Tras una exigente gira por tierras alemanas, la victoria en Autol ante el Naturhouse robusteció la moral naranja. Sin embargo, el decepcionante papel desarrollado en el Torneo Ciudad de Zaragoza exige una reacción inmediata. Peor que el resultado ante el Granollers (11-13, en solo 30 minutos), fueron las sensaciones percibidas. Mejor dicho, las que se dejaron de percibir: no se aprecia evolución en el juego del CAI Aragón a pesar de los refuerzos (Lozano, Val y Masachs). Egia debe significar un punto de inflexión en este encefalograma hasta ahora plano.


Sin edulcorantes en agosto, siempre ante rivales notables o al menos aceptables, el CAI Aragón persigue un golpe de autoridad en Egia. Ganarle esta tarde al Reale Ademar de León y de don Jordi Ribera significaría la confirmación al intenso trabajo de pretemporada. Caer reiteraría la impresión de que a veces, aunque se entrene mucho, como en los últimos tiempos, no se ganan partidos. Entrenar es bonito; ganar, precioso. Si puede ser precioso, ¿para qué dejarlo solo en bonito? Hay que ganar.