DOS SEMANAS PARA CERRAR LA PLANTILLA

Días contados

El Zaragoza tiene solo 12 fechas para hacer los deberes que no ha rematado en los 92 días que han pasado desde que consumó el descenso en mayo

Hoy lunes, 18 de agosto, nace la penúltima semana de la pretemporada. Apenas faltan 12 días para que se inicie el campeonato futbolístico en España y el Real Zaragoza tiene aún muchos frentes abiertos que le impiden dar por cerrada su plantilla, ese grupo selecto de futbolistas que pretende formar Agapito Iglesias -apoyado de manera decisiva en su mano derecha, el secretario técnico Pedro Herrera- para regresar a la elite en un solo año.


Cuando se cumplen tres meses exactos desde que el Real Zaragoza consumó su descenso a Segunda División en Mallorca, en aquella lluviosa tarde del 18 de mayo, el máximo accionista del club aragonés tiene ante sí el remate de muchos deberes que no ha culminado en tan largo espacio de tiempo. Han pasado ya 92 días desde aquel último partido en Primera en el campo de Son Moix y Marcelino García Toral, entrenador fichado con celeridad máxima para capitanear el reto supremo (llegó el 28 de mayo), todavía no ha visto cumplidas sus peticiones básicas.


Al técnico asturiano le siguen faltando un portero, un defensa central y dos hombres de banda respecto de su paquete de mínimos para poder cambiar a su gusto la cara del equipo que bajó a Segunda. Las llegadas de Braulio, Antonio Hidalgo, Fabio Coentrao, Pablo de Barros y Arizmendi, las únicas novedades captadas en el mercado junto a la repesca de los cedidos Ewerthon, Zaparain y Ripa, son a todas luces insuficientes para Marcelino y, por lo visto a lo largo del verano, para el propio funcionamiento del espeso, atrancado y dubitativo equipo.


Junto a esa notable falta de refuerzos según el criterio del entrenador (si han llegado 5 y todavía restan 4, estamos hablando de que casi la mitad están por aterrizar), se entremezcla la presencia en el actual plantel de una serie de futbolistas prescindibles -bien por causas deportivas, bien por económicas- que otorgan a la plantilla un indeleble carácter volátil y lleno de provisionalidad desde que se iniciaron los entrenamientos el 14 de julio. Cierto es que son varias las 'operaciones salida' relevantes que ya se han ejecutado en este largo periodo estival: Aimar, Matuzalem o el polémico adiós anticipado de Juanfran y César Sánchez provocado por el propio club. Pero, teniendo en cuenta el plan inicial, son de todo punto insuficientes. En especial, lo que está aconteciendo en la delantera, donde no existe la seguridad absoluta de quién va a permanecer este año en Segunda -los casos de Diego Milito, Sergio García, Ewerthon y hasta Oliveira, siguen abiertos-, tiene en vilo a Marcelino y puede ser una caja de sorpresas en las últimas horas del mercado estival el próximo día 31.


92 días después del descenso y a solo 12 para el arranque de la liga, el Zaragoza puede estar ante ocho o diez operaciones de fichajes y traspasos de gran calado. Da la impresión de que son demasiadas.