Torrevieja. Premio gordo del concurso 'Un, dos, tres'. En vez de un apartamento, también podía tocar un coche. Y, si metías la pata, la calabaza Ruperta, que, como todas las calabazas, significa un fiasco. Torrevieja también fue sede de la etapa prólogo de la Vuelta a España. Y hasta tiene un club de balonmano: el representativo de Alicante. Equipo grande en los tiempos del histórico Calpisa. Ahora, un superviviente más de la Asobal. Allí, en Torrevieja, el CAI Aragón disputará hoy (20.30) la vigésimo sexta etapa de la carrera de la Liga Asobal. La meta consiste en recortarle cuatro puntos al Naturhouse La Rioja en las cinco jornadas que restan, y finalizar en la séptima plaza, que puede tener premio de un apartamento en la próxima edición de la Copa EHF. Lo contrario sabrá a fracaso, a calabaza: soso, soso.

Ayer llegó el CAI Aragón a Alicante. Viajó en avión, hecho extraño cuando hace unos días cruzó la Península en autobús para jugar ante el Almería. Desde el Valle del Ebro al Cabo de Gata a cuatro ruedas, que son pocas ruedas y es mucho cruzar. Ahora va volando, pues volando saldrá mañana jueves rumbo a Alemania, previa escala en Palma de Mallorca. Hoy juega en Torrevieja, decía, pero todo el mundo es consciente de que hay que llegar en plenitud al encuentro de la EHF del sábado ante el Gummersbach, donde tanto hay en juego.

Veroljub Kosovac ha desplazado a toda la plantilla a excepción de Zaky. Para el genio egipcio terminó la temporada en Almería, con la maldita fractura que sufrió en el metacarpiano del tercer dedo de la mano derecha. Dalibor Doder también ha viajado, a pesar de que sigue lesionado. Se espera que pueda jugar ante el Torrevieja y, sobre todo, ante el Gummersbach. Extraño caso el de la lesión de Doder. El jugador dice que padece una lumbalgia. Desde luego, manifiesta claros síntomas de esa dolencia. Sin embargo, el club no ha emitido parte alguno relativo a los males del jugador. Tampoco se ha comunicado el tratamiento de rehabilitación que han decidido establecer los servicios médicos del club. Desde luego, la aportación goleadora de Doder se intuye decisiva para sacar adelante la eliminatoria europea. El caso es que Doder lleva una semana parado y no manifiesta síntomas evidentes de recuperación. Ya se pagó carísima la lesión de Prendes en la primera vuelta de la Liga. Malo será que tengamos que acordarnos de Dalibor Doder el próximo sábado.

El Torrevieja llega a la jornada con 18 puntos y la permanencia casi asegurada. En el club alicantino la baja más sensible es la de su entrenador. Manolo Laguna sufrió una intervención quirúrgica semanas atrás y todavía continúa convaleciente. Merma a subrayar la ausencia temporal de Laguna, un tipo que ha aportado muchísimo al balonmano español. Profundo conocedor del juego, ha sabido sacarle un elevado rendimiento a un plantel limitado. Su balonmano pausado, con una eficaz defensa cerrada, es digno de elogio. Poco hay que elogiar hasta el momento en el CAI Aragón. La gloria sigue esperando. Está en Europa. En la Asobal, solo queda ganar hoy y continuar remando hasta la séptima plaza.