Fútbol

De cuidar el césped del Zaragoza al Camp Nou

Antes del Barcelona-Sevilla del pasado sábado, el ex técnico del Zaragoza y ahora entrenador del equipo andaluz, Marcelino García, habló durante varios minutos con el que ahora es jardinero del Barcelona y que antes trabajó para el club aragonés, Toni Codina.

Codina en el Camp Nou
Codina en el Camp Nou

El final de la rueda de prensa de Marcelino García Toral en el Camp Nou tuvo un final que pocos esperaba. El técnico del Sevilla terminó hablando de su paso por el Real Zaragoza, y de un amigo que hizo en tierras aragonesas.


“Míster, antes del partido le hemos visto hablando con el jardinero del Camp Nou, ¿había visto algo raro en el césped?”, le preguntaron a García, que contestó en tono risueño: “A ver... ese chico trabajó para arreglar el campo del Zaragoza durante 7 meses. Es un extraordinario profesional y persona, tengo muy buena relación con él. Le estaba dando la enhorabuena, sé de su capacidad y su dedicación...”.


Hablaba de Toni Codina, un barcelonés que se encargó de cuidar los campos del Zaragoza cuando Marcelino era el director técnico. “Aún nos mandamos mensajes, hablamos seguido. Siempre estaba encima del trabajo, supervisaba todo, me pedía cosas y me comentaba qué le parecía bien y qué mal”, recuerda el actual 'jardinero del Camp Nou'.


En Zaragoza conoció a muchos amigos, porque a diario convivía con los jugadores en el entrenamiento. Le llamaban Djokovic, "porque decían que me parecía a el tenista".

"Siempre es la misma altura"

Trabaja para la empresa Royal Verd y después de vivir en la capital aragonesa se mudó para cuidar uno de los grandes campos de España, el de su ciudad, el del Camp Nou. Conoce todos los secretos del césped de ese estadio, como que no se corta ni más ni menos largo según quién sea el visitante, aunque casi todos los medios de comunicación dicen lo contrario: “Siempre es igual... Un poco más bajo que el del Zaragoza, pero eso es por las condiciones climáticas”.


Lo que sí se ajusta al rival es el regado, aunque no es habitual. Más o menos agua se descarga para intentar que el juego sea más o menos rápido.


Codina no habla más del tema, porque, entre otras cosas, su jefe, Eudald Morera, advierte que “una cláusula” les impide contar intimidades de los estadios en los que trabajan. “Llevamos mucho tiempo en esto y siempre pensamos en lo mejor para cada club”, comenta el consejero delegado de Royal Verd.


Ellos se encargaron del último cambio de césped de La Romareda, en 2007. “Fue un viernes y el domingo ya se jugó, son cosas rápidas”, comenta Codina. En su nuevo estadio, esto sucede con más frecuencia.


Clubes como el Barcelona y el Real Madrid realizan esos cambios casi cada año, porque sus estadios se utilizan para otros eventos, aunque “eso no tiene necesariamente que afectar la calidad del tapete”.


El año pasado, la crisis obligó al club aragonés a prescindir de los servicios de Royal Verd y ahora es un personal propio el que se encarga de la jardinería.Amistades zaragocistas

El fin de semana antes del partido Barcelona – Sevilla, Marcelino le preguntó a Codina cómo le  iba la vida, recordó algunas vivencias comunes en Zaragoza y conversó como con cualquier otro amigo.


Toni Codina llegó a la capital aragonesa el año que el Real Zaragoza jugó en Segunda División y describe aquella época como alegre, “porque al final se consiguieron los objetivos”. Al año siguiente, las cosas fueron más complicadas, sobre todo por el despido de García.


Durante esos meses, en los que estaba “muy cerca de los jugadores” porque se encargaba del campo de entrenamiento, también comenzó una amistad con el portero Toni Doblas. “Es muy alegre y seguimos en contacto por redes sociales y mensajes en el móvil”, cuenta Codina.


Asegura que aquella temporada todo el grupo era consciente del paso que habían dado y que por lo que él veía, “después de subir a Primera seguían luchando y querían ser mejores, nadie se relajó”.


Sobre los cambios en su vida profesional al subir de Segunda a Primera con el Zaragoza, y luego pasar a cuidar el césped uno de los estadios más famosos del mundo, él asegura que las exigencias son las mismas, aunque hay cosas que cambian.


“El contacto con los jugadores es menor, allá (en Zaragoza) estaba en los entrenamientos y los tenía más cerca, aquí los saludo y hablo con algunos, pero solo los veo cuando hay partido”, afirma.


Sobre Pep Guardiola asegura que es un entrenador como otros, mantiene contacto con ellos y de vez en cuando tiene una petición específica sobre el césped.