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Calderón sorprende a todos y ya forma parte de la historia

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Calderón sorprende a todos y ya forma parte de la historia
EFE

Los preparadores físicos y el entrenador de los Raptors de Toronto tenían un plan de adaptación para José Manuel Calderón en su primer partido después de 12 días de inactividad por lesión, pero el base español sorprendió a todos con una exhibición de baloncesto en el United Center de Chicago.


Calderón, en sólo 30 minutos, no sólo les dio a los Raptors el triunfo por 94-114 ante los Bulls de Chicago, con el que rompieron la racha de siete derrotas consecutivas, sino que también les mostró el camino para seguir siendo un equipo ganador. "Por primera vez en mucho tiempo hemos jugado un partido los 48 minutos", sentenció Calderón al concluir el partido, en el que había logrado su noveno doble-doble de la temporada con 23 puntos y 10 asistencias.


Luego recordó que el partido era para cualquier de los dos equipos hasta que en los últimos cuatro minutos los Raptors se mantuvieron presionando y centrados en su juego. "No somos un equipo de estrellas, nuestro gran éxito está en el trabajo de conjunto y si lo hacemos bien seremos mucho mejor de lo que muestran las estadísticas", declaró Calderón al concluir el partido.


Calderón, que no podía ocultar su alegría y felicidad por la gran noche vivida en el United Center, al margen del triunfo conseguido por el equipo, también estaba contento por la manera como le había respondido la pierna derecha, que se lesionó el pasado 2 de enero. "Todo ha ido muy bien, me siento perfectamente y espero que mañana con el entrenamiento no tenga ningún tipo de problema para seguir haciendo aun mejor las cosas", señaló Calderón. "Ahora hay que volver a ganar".


Sin embargo, para nada el base español quiso hablar de los cuatro tiros de personal que anotó y que le colocaron ya con la segunda mejor marca en la historia de la NBA al llegar a los 83 consecutivos sin fallar.


Calderón superó al alero Mahmoud Abdul-Rauf (81) y se ha colocado a 14 de empatar la mejor marca de todos los tiempos que está en poder de Michael Williams (97) desde 1993.


Un logró que sólo está reservado para jugadores muy especiales como Calderón, a quien cuando llegó a la NBA le descubrieron los técnicos de los Raptors que tenía graves problemas en los mecanismos que utilizaba para tirar a canasta.


El ex jugador del Tau Cerámica levantaba mucho el codo derecho y los especialistas del equipo, entre ellos el ahora entrenador Jay Triano, tuvieron que hacer horas extras para que el proceso de cambio fuese efectivo.


Triano admite con cierta satisfacción que hicieron un buen trabajo, pero le da el mérito a Calderón que trabajó más que nadie para asimilar las enseñanzas, algo que el jugador español reconoce con agradecimiento, tras admitir que tuvo que cambiar todo en su forma de tirar a canasta.


Calderón tiene un especial agradecimiento hacia Dave Hopla, quien cuando llego a los Raptors, en el 2005, era el asesor del equipo en los tiros a canasta, y del propio Triano, que estaba como asistente del ex entrenador Sam Mitchell.


Su esfuerzo no sólo lo hizo ser un mejor jugador sino que ya ha entrado a formar parte de la historia de la NBA, al margen de que pueda batir la marca de Williams.


Como muy bien reconoce Calderón, el acertar en los tiros de personal no sólo depende de la técnica, que es fundamental, sino también de la suerte con pequeños detalles como que el balón no se te resbale algo de la mano, que tires mucho más fuerte o simplemente que toque el aro y se vaya fuera.


De momento, todos los elementos se han combinado para que Calderón sea ya por méritos propios el mejor tirador de personales que hay actualmente en la NBA.


Pero para el jugador español lo más importante es que cuatro años después de haber llegado al baloncesto profesional estadounidense es "mucho mejor encestador", no sólo desde la línea de personal sino desde cualquier posición del campo.