Complicado desplazamiento a Logroño para el Bada Huesca

El Bada Huesca afronta una complicada salida este miércoles ante el BM Logroño La Rioja (20.45), uno de los equipos más potentes de la Liga Asobal que, sin embargo, suma como los oscenses 24 puntos. Se enfrentan el cuarto y el quinto clasificados. Los de José Francisco Nolasco se mantienen invictos en la segunda vuelta y, de nuevo, pendientes de la portería. La gran actuación del canterano Jorge Broto en la victoria sobre el Guadalajara supone un aval por los problemas físicos de Dani Arguillas y Jorge Gómez.

Asimismo, Oier ha empezado la semana entrenando, por lo que Nolasco podrá contar con él. El preparador asume que llegan a una fase de la competición en la que deben afrontar un calendario complicado. “Este mes de marzo viene cargado. Nos hemos preparado para estar fuertes para estos partidos, lo único que te puede dar respeto es el tema de las lesiones pero no podemos hacer nada, lo único que podemos hacer es prevenir con el fisio o haciendo entrenamientos a medida”, ha reseñado.

Los riojanos son “un equipazo que puede luchar por esa segunda o tercera plaza, al igual que nosotros. En esta segunda vuelta han empezado con buen pie, con dos victorias y una derrota”. El rival de este miércoles “está inmerso en dos competiciones súper exigentes y vamos a ver en qué condiciones físicas y mentales llegan”.

Los oscenses intentarán aprovechar todas las situaciones favorables que se les presenten ante los riojanos para no dejar escapar los dos puntos que están en juego. “Cuando juegas contra rivales fuertes, que tienen jugadores de calidad que saben resolver situaciones rápidas y efectivas cometiendo pocos errores, no puedes permitirte cometer errores. Por lo tanto, para estar en el partido tendremos que mantener un alto nivel de concentración”, ha reflexionado.

El equipo riojano es cuarto a un punto del segundo, lo que revela lo trascendental que es el partido para los dos equipos pero más si cabe para el que juega en casa, el Logroño, que en la ida empató a 25 con los oscenses. El cansancio puede ser un enemigo más para el equipo riojano, sobre todo en el aspecto mental dado el exigente esfuerzo que le han supuesto sus últimos partidos en la Copa EHF ante rivales muy superiores en plantilla (Saint Raphael y Berlín), con los que ha competido pero ha perdido.