Mundial de balonmano

Rivera: "Es más que un sueño"

"Se hablará muchísimos años de este partido contra una Dinamarca de maravilla".

El seleccionador nacional de balonmano, Valero Rivera, ha asegurado ser "absolutamente feliz" por haber conseguido el oro en el Mundial, gracias a la victoria sobre Dinamarca (35-19) de esta tarde en el Palau Sant Jordi, y ha añadido que es "más que un sueño" lo que está viviendo, por lo que ha querido agradecer a sus jugadores el trabajo que han hecho. 


"Estoy absolutamente feliz, es más que un sueño, es imposible que una película acabe mejor. Mi agradecimiento absoluto a los jugadores por su trabajo y compromiso. Hemos vivido un partido que no habrá otro igual con dos grandes selecciones y un resultado anormal. Campeones del mundo en Barcelona con el Sant Jordi lleno, soy extraordinariamente afortunado", manifestó en rueda de prensa.


Rivera, que se sinceró por completo, agradeció el apoyo de todos los que han estado a su lado estos cuatro años y que le han ayudado a superar alguna "porquería" que le han tirado encima, pero sobre todo tuvo palabras de elogio para su capitán, Alberto Entrerríos, que se retira de la selección como campeón del mundo.


"Agradezco a los que empezamos hace cuatro años, a los que sufrimos la derrota contra Francia en los Juegos Olímpicos, a los que no están porque están lesionados, Raúl y Ugalde. A Alberto mi agradecimiento más absoluto, me equivoqué no llevándole a la Olimpiada, fue un error. Agradezco que haya querido volver. Es lo que se merece, dejar la selección como campeón del mundo, le ha faltado que esté a su lado su hermano. Le agradezco todo por su carrera y valor humano", manifestó.


Y es que el asturiano y el resto de 'hispanos' han hecho un trabajo de un "mérito incalculable". "No han dejado jugar a algunos de los mejores jugadores, como Hansen. Tienen a uno de los tres mejores porteros del mundo, que tengo aquí a mi lado. Sé que nos cuesta mucho hacer lo que hacemos y es todo en base al trabajo, hay que felicitar a los jugadores", argumentó.


Por ello, cree que este será un partido del que se hablará muchos años. "Que en una final de Mundial suceda esto, contra una Dinamarca que es una maravilla de equipo, es para felicitar a los jugadores. Sería injusto para ellos que se hablara de demérito de los otros", aseveró al respecto. "Jugar en casa da un plus, pero creo que hemos pensado mucho en lo que podíamos hacer para que ellos no hicieran su juego. La defensa del equipo en la primera parte es escandalosamente buena. Hay que hacer tantas cosas bien hechas para que con 6 paradas de Landin ganes de 8, y luego Arpad ha impedido él solo que levantaron los ocho goles", celebró.


Pero si Dinamarca es una maravilla de equipo, no cree lo mismo de su entrenador, Ulrik Wilbek. "Felicitar al equipo danés por el torneo que ha hecho, por cómo ha jugado. Me decepciona mucho que la primera vez de cuatro que pierden no esté aquí el entrenador, nosotros siempre hemos estado y he pensado alguna vez que podríamos haber ganado. Es indigno del considerado mejor entrenador del año por la IHF", lamentó el seleccionador nacional, sentado al lado del jefe de prensa danés, quien se presentó en nombre de Wilbek a la rueda de prensa.


"Quiero felicitar también a Croacia y a Eslovenia, han hecho un balonmano de mérito. También disfrutar de este momento en Barcelona y con la familia es lo más, lo mejor de todo esto. De los momentos que he dicho que había que aguantar, ellos me han ayudado. Ha sido la semana más dura de mi vida por la presión, hoy es un día demasiado bonito para ser real. Parece mentira", concluyó.


Por otro lado, no quiso hablar de su futuro ni de si este sería su último campeonato. "No quiero hablar ahora de esto, es momento de máxima celebración para el balonmano español. Hoy todo el balonmano español ha conseguido un éxito tremendo, porque no siempre el que organiza gana y más como lo ha hecho el equipo", argumentó.