El sueño de la cuarta plaza

Andar antes de correr. En los últimos años, ese ha sido el mantra repetido una y otra vez desde el CAI Zaragoza. La conocida como filosofía del partido a partido. Sin planes a largo plazo. Prácticamente, sin objetivos definidos más allá de hacerlo lo mejor posible. Una manera de ser, y de comportarse, que este año más que nunca está dando sus réditos. Tras haber logrado la participación en la Copa del Rey, los rojillos se encuentran, a falta de seis jornadas, a las puertas del 'Play-off' por el título. Una meta de la que, salvo catástrofe inesperada, solo queda por concretarse en qué posición accederán los zaragozanos a la postemporada.

Después de vencer a Lagun Aro el pasado fin de semana, y tras los resultados acaecidos en la jornada, el conjunto dirigido por José Luis Abós se encuentra séptimo en la tabla, a dos partidos de Unicaja que es noveno. Los malagueños, curiosamente, son el próximo rival del cuadro aragonés. Un duelo directo que aclarará, todavía más, las opciones de los zaragozanos de cara a final de temporada.

Porque si bien en el CAI se tienen los pies en el suelo, “sabemos que está cerca pero hay que seguir trabajando para lograrlo lo antes posible”, decía Van Rossom este lunes, hay algunas voces atrevidas que se animan a hablar de sueños. Nada irrealizable, por otro lado. Ya que, si se levanta la vista hacia arriba, la cuarta posición se dibuja a una sola victoria de distancia. ¿Por qué no?Aspiraciones

Con el umbral de la exigencia perfectamente delimitado en la primera clasificación de su historia para las eliminatorias por el título, no resulta ninguna locura intentar aspirar a finalizar lo más alto posible. Igualado el máximo histórico de triunfos logrados en una temporada, la escuadra rojilla tiene en su mano terminar la liga regular con el factor cancha a favor. Un escenario impensable cuando arrancó el curso tras una accidentada pretemporada en la que todos los amistosos jugados se habían contabilizado como derrotas.

El calendario hace accesible el reto. Dos partidos sobresalen por su dificultad. El primero, la salida a Málaga de este domingo. A pesar de su irregular temporada, una vez eliminados de la Euroliga el Unicaja es un rival muy complicado por lo extenso de su plantilla. Calidad a la que se ha de sumar la exigencia de finalizar en una posición que le permita volver la próxima temporada a la máxima competición continental. El otro pico a escalar también se encuentra lejos del Príncipe Felipe, en Bilbao, a donde los aragoneses viajarán en la jornada 31.

El resto de encuentros deberían resultar abordables para los rojillos. Que no fáciles, claro. Por delante: Blancos de Rueda Valladolid, Manresa y UCAM Murcia, así como la salida a Fuenlabrada. Cuatro equipos inmersos en la lucha por evitar el descenso. Aunque, como se ha demostrado, capaces de vencer a cualquiera. Compromisos en los que el CAI Zaragoza debe demostrar su estatus de equipo puntero de la Liga.