BALONCESTO
Desafío en Málaga para el Casademont
El equipo de Porfirio Fisac visita al peligroso Unicaja en una cita en la que buscar rehabilitar su baloncesto.
Después del inoportuno desliz de la derrota contra Bilbao, la necesidad se ha vuelto a instalar en el discurso del Casademont Zaragoza, a quien le espera un compromiso áspero, riguroso y considerable en el pabellón Martín Carpena (20.45) de Málaga. Un pulso ante uno de los rivales más robustos e inaccesibles del momento en el baloncesto español, pero ante el que el equipo de Porfirio Fisac tratará de recuperar las buenas notas del impacto producido por el relevo de entrenador. El Casademont aún es un equipo inestable y tierno. De debilidades todavía muy expuestas. Su armazón colectivo se deshace en cuento el guion de los partidos se escapa de su control, como sucedió contra Bilbao.
El estímulo de Fisac es incuestionable en el baloncesto del equipo, pero esa reacción es aún escasa, precisa más tiempo, ideas, serenidad… Unicaja pondrá a prueba esa evolución. Es un conjunto en estado de excitación: suma siete triunfos consecutivos entre los partidos de la Liga Endesa y los de la Liga de Campeones. Es fuerte en su domicilio y presenta una rotación completa y profunda, sin nombres de primera fila, pero con jugadores de una imponente solvencia competitiva, como los internacionales Darío Brizuela y Alberto Díaz, uno de los defensores mejor calibrados del baloncesto FIBA. A ellos, se les une el impacto del alero Nihad Djedovic en la anotación. En el grupo malagueño, dirigido por el emergente Ibón Navarro, también destaca la presencia de Jonathan Barreiro, exjugador del conjunto aragonés. Son los nombres de un bloque compacto, muy equilibrado y con piezas de notable experiencia, como Augusto Lima, Melvin Ejim o Will Thomas.
Málaga es una plaza de buen recorrido en la historia de Casademont, donde ha ganado siete de los 13 partidos jugados. Es una buena base sobre la que apoyar las intenciones del equipo de Fisac para recuperar la buena línea. El técnico podrá contar con todos los jugadores de la plantilla, en la que se espera que Wright, el último refuerzo, dé un paso adelante en términos físicos y de juego.
Los zaragozanos deberán resintonizar su acierto ofensivo después de la mala producción anotadora contra Bilbao. Recuperar esa amenaza, que en los días previos había encarnado en el tiro Justinian Jessup, se intuye una premisa básica para poder volver de Málaga con el triunfo en las alforjas. Será una nueva oportunidad para comprobar si el baloncesto de los hombres de Porfirio se va acercando a sus mejores versiones personales.
Por su parte Unicaja, desde su quinta plaza, buscará seguir trepando en la clasificación. La cita les llega tras jugar competición europea en Francés y tener problemas de vuelos. Un retraso que apenas les va a dejar margen de recuperación. Otro factor que deberá explotar Casademont ante este nuevo desafío en su reanimación como equipo.
