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Marc Gasol vuelve al baloncesto español con el Levitec Huesca como primer rival
El pívot de 36 años ‘redebuta’ este viernes tras 13 temporadas en la NBA y se mide al conjunto aragonés en el pabellón de Fontajau.
El regreso de Marc Gasol al baloncesto español y su incorporación al club que preside, el Bàsquet Girona, supone un movimiento de impacto mediático mundial que volverá a poner en primera fila la Liga LEB Oro. El pívot catalán, de 36 años, vuelve este viernes a las pistas y el azar del calendario ha dictado que el rival sea el Levitec Huesca La Magia en el pabellón de Fontajau (19.00, Aragón Deporte y LaLigaSports). El cruce entre dos equipos inmersos en rachas negativas queda eclipsado por el concurso del menor de los hermanos Gasol. El estado de forma que presentará, pues no compite desde los Juegos de Tokio, y los minutos que estará en la pista parecen lo de menos.
Y es que el movimiento, confirmado la semana pasada, ha generado asombro y extrañeza a partes iguales. Porque los aficionados entienden que Marc Gasol todavía guarda baloncesto como para competir a un alto nivel. Ha jugado las 13 últimas temporadas en la NBA (Memphis Grizzlies, Toronto Raptors y Los Angeles Lakers) y ganado un anillo con los canadienses en 2019. Pertenece a la generación más brillante del baloncesto español. Su concurso en el club gerundense obedece a razones más sentimentales que deportivas y aleteó a su alrededor la posibilidad de desembarcar en el FC Barcelona, como su hermano Pau unos meses antes.
Marc jugó en el Club Básquet Girona entre 2006 y 2008, tras salir del Barça y antes de emprender su larga travesía por la mejor liga del mundo. En esas dos campañas le alcanzó para ser nombrado MVP de la ACB y ganar la FIBA Eurochallenge. La entidad desapareció en 2013 por problemas económicos y al año siguiente el jugador contribuyó como presidente desde 2014 a reflotarla bajo otra denominación y el anhelo de devolverla a lo más alto. De momento compite en LEB Oro y la presencia del pívot se quiere interpretar como el inicio de ese camino. El propio jugador quiso desinflar la euforia en su presentación: “Marc Gasol juega con el Bàsquet Girona y todo es muy romántico y bonito, pero también hay una exigencia interna muy grande. Intentaré dar seguridad al equipo desde dentro”, señaló en declaraciones al Diari de Girona.
El equipo catalán le espera con los brazos abiertos. Ha sufrido siete derrotas consecutivas que le han atado a la zona baja de la clasificación y provocado el cese del técnico Carles Marco. El interino Jordi Sargatal se sentará en el banquillo hasta el final de la temporada y dará este viernes los primeros minutos al menor de los Gasol, que en los últimos dos meses ha compaginado su labor institucional con la puesta a punto física además de conocer a sus nuevos compañeros. Su presencia intimidatoria, experiencia y 211 centímetros deberían preocupar a sus rivales; el primero, un Levitec Huesca La Magia que también llega necesitado a Fontajau.
Los verdiblancos no quieren ser un convidado de piedra ni poner la alfombra roja al retorno de Marc Gasol. El parón por la ventana FIBA devuelve a los peñistas con dos efectivos menos después de que el club haya cortado al pívot serbio Aleksandar Andrejevic y al alero y escolta canadiense-nigeriano Keith Omoerah. La búsqueda de un pívot sigue centrando los esfuerzos de la entidad y el equipo entrenado por el zaragozano Sergio Lamúa es colista con una victoria y ocho derrotas. Tiene a tiro, eso sí, a los catalanes con su bagaje de 2-7. El Peñas y Marc Gasol ya cruzaron sus caminos antes: fue en la temporada 2003-04 y con el FC Barcelona de la Liga EBA.
