baloncesto
Decepcionante estreno europeo del Casademont Zaragoza (100-80)
El equipo aragonés pierde con amplitud en Rusia, ante el Avtodor Saratov, en la primera jornada de la FIBA Europe Cup.
El Casademont Zaragoza decepcionó en su estreno continental. En Rusia, ante el Avtodor Saratov, el cuadro aragonés sólo resistió los primeros 20 minutos de la contienda (100-80). Después se descompuso, víctima de su propia ansiedad, y abandonó rutinas y automatismos en los dos lados de la pista. Finalizó el duelo con sensaciones muy negativas en su juego, acentuando una crisis que también se extiende a la FIBA Europe Cup.
A las cuatro derrotas consecutivas que encadenan los zaragozanos en el torneo doméstico -San Pablo Burgos (54-75), Valencia Basket (70-76), Barcelona (76-63) y Lenovo Tenerife (90-65)-, se añade ahora el oprobio de este miércoles ante los rusos, que dificulta sobremanera el acceso a la siguiente fase de la competición: el formato del torneo, con sólo cuatro equipos por grupo, castiga con severidad cualquier tropiezo inesperado -sólo avanzan de ronda los dos primeros clasificados-, y los 20 puntos de desventaja representan una rémora mayúscula en el duelo directo ante el Avtodor Saratov. Al margen de haber ofrecido, una vez más, una imagen desalentadora, en ataque y en defensa, que alimenta el debate sobre la verdadera capacidad competitiva de la plantilla.
En el inicio, el Casademont ya fue un bloque inconsistente atrás, con numerosas desatenciones, sin capacidad alguna para anular el caudal ofensivo de su adversario. Especialmente en la defensa del perímetro, donde los rusos dispusieron de lanzamientos liberados, sin apenas oposición, para castigar sin remisión a los zaragozanos. A los siete minutos de juego, el equipo local había adquirido un renta de 6 puntos en el marcador (23-17), impulsado sobre todo por su puntería en los lanzamientos triples (4 aciertos de 6 intentos). Jaume Ponsarnau optó por detener el partido, consciente de los grandes desequilibrios de su equipo en las labores de contención. Por entonces, el Casademont competía gracias al talento individual de Stan Okoye (8 tantos) y Matt Mobley (6).
Tras el tiempo muerto, los visitantes elevaron sus prestaciones defensivas, ya con McLean y Radoncic en la pista, y el Avtodor Saratov dejó de anotar. Al cierre del primer cuarto, la renta local se había reducido a sólo dos puntos (23-21), con los aragoneses -ahora sí- emitiendo señales positivas en su juego. Y en la primera acción del segundo cuarto, Waczynski volteó el marcador con un certero triple (23-24), castigando un importante desajuste de los rusos. De ahí hasta el descanso, se produjo un intercambio de golpes del que salió favorecido el Casademont. Al cuarto de hora, los zaragozanos habían edificado una ventaja de cinco puntos (30-35), después de un triple de Aleix Font y una canasta de Radoncic bajo los aros, lo que se tradujo en el tiempo muerto del técnico local, Emil Rajkovikj.
El Avtodor Saratov aumentó ligeramente su intensidad, pero el Casademont se mantuvo firme, muy seguro de sus fuerzas, y además golpeó desde el perímetro con los lanzamientos de Okoye y de Rodrigo San Miguel. Y aunque Zeljko Sakin fue un incordio permanente durante toda la primera mitad (16 puntos al descanso), los zaragozanos incrementaron su renta al término del primer tiempo (40-47), gracias a seis tantos consecutivos de Matt Mobley. En el intermedio, el escolta era el máximo anotador de los visitantes, con 12 puntos en su haber, la mayoría tras haberse fabricado sus propias canastas, seguido muy de cerca por Stan Okoye (11), quien, a su elevada facturación, sumaba también 6 capturas en los primeros 20 minutos del duelo.
El Casademont fue un bloque vacilante y quebradizo en los primeros compases a reanudación. En ataque sumó cuatro pérdidas consecutivas, fruto de su juego anárquico y precipitado, y los locales enseguida igualaron la contienda con las canastas de Jerrett y Chery, más un triple liberado de Zeljko Sakin (47-47). Lejos de reaccionar, el equipo de Ponsarnau acentuó sus dudas: permaneció los cinco primeros minutos del cuarto sin anotar, lo que conllevó un parcial de 1-0 a favor de los locales (55-47). Vanwijn, con una acción individual, y Matt Mobley, con dos aciertos desde el perímetro, salieron al rescate del conjunto aragonés en un momento especialmente comprometido (60-55).
Sin embargo, el equipo aragonés carecía de un juego colectivo solvente. El Avtodor Saratov había tomado el mando y se imponía, sin apenas oposición, en todos los órdenes del juego. A la media hora, la renta de los locales había aumentado hasta los 8 puntos (68-60), después de un tercer acto desalentador del equipo zaragozano (28-13 de parcial en 10 minutos).
A partir de ahí, el Casademont fue incapaz de sobreponerse. Okoye trató de aportar oxígeno, siempre con acciones personales (19 puntos aportó el nigeriano), y San Miguel tiró de orgullo y arrojo para intentar reducir un descalabro cada vez más insoportable; pero el Avtodor Saratov, siempre intenso y tenaz, siempre presto al combate, no dio opción alguna a la remontada. Menos aún cuando exhibió un acierto devastador desde más allá del arco: a cinco minutos de la conclusión todavía presentaba un 54% de efectividad en los triples, tras haber convertido 13 de sus 24 lanzamientos. Por entonces, ya hacía tiempo que el conjunto aragonés había bajado definitivamente los brazos.
Ficha técnica:
100 - Avtodor Saratov (23+17+28+32): Chery (8), Scrubb (16), Jerrett (10), Sakic (19), Kolesnikov (9) -cinco inicial- Funderburk (11), Kvitkovskikh (3), Petenev (-), Pranauskis (-), Johnson (18), Minchenko (-) y Sergeev (6).
80 - Casademont Zaragoza (21+26+13+20): San Miguel (7), Mobley (18), Okoye (19), Vanwijn (5), Hlinason (-) -cinco inicial- Radoncic (14), Vilà (-), Font (3), McLean (5), Sipahi (6) y Waczynski (3).
Árbitros: Vitkauskas (Lituania), Jevtovic (Serbia) y Kaludjerovic (Montenegro). No hubo eliminados.
Incidencias: Partido de la primera jornada del grupo D de la Copa de Europa disputado en el Kristall Arena de Saratov (Rusia)
