El Casademont Zaragoza gana crédito tras imponerse en Andorra (83-98)

El Casademont sumó este viernes su tercera victoria en la Liga Endesa (83-98), la primera a domicilio, tras completar en Andorra una de sus mejores actuaciones de la temporada. Fue, por fin, un equipo unido, comprometido y solidario, muy activo en los dos lados de la pista, y su notable desempeño le proporcionó un triunfo de rango mayor. Su oponente, un sólido aspirante a los puestos de ‘play off’, se presentaba a la cita en un momento especialmente productivo, tras haber encadenado tres triunfos consecutivos en la Liga Endesa. Este viernes, sin embargo, fue permanentemente superado por el conjunto aragonés, que restaura su dañado prestigio y, sobre todo, alimenta su autoestima justo ahora, cuando le sobreviene un tramo decisivo en su recorrido hacia la salvación. De hecho, el Casademont se medirá mañana con el Bilbao Basket, y debe enfrentarse aún aún con otros rivales directos como el Real Betis y el Estudiantes, antes de alcanzar el ecuador del campeonato.

Aunque Brussino, con 28 créditos de valoración (16 puntos), fue el jugador más productivo de los visitantes, otros muchos jugadores tuvieron una aportación determinante para el triunfo. Entre ellos, Ennis (22 tantos) Benzing (17), Thompson (14) y Barreiro (13), quienes también ofrecieron un elevado rendimiento.  

El cuadro local azotó desde el perímetro en el inicio, con los triples consecutivos de Sergi García y de Jeremy Senglin. El Casademont erró en sus primeras acciones -tres pérdidas de Bray en apenas tres minutos- pero se sostuvo con cinco puntos de Dylan Ennis y una canasta de Barreiro desde más allá del arco (10-8). Idénticos protagonistas lideraron las siguientes acciones de ataque de los aragoneses: Barreiro redujo distancias, tras capturar un rebote ofensivo, y Ennis puso por delante a los zaragozanos, poco después, al culminar un rápido contragolpe (12-13). Y aunque el Andorra reaccionó con los puntos de Jelinek, apareció entonces Robin Benzing para encontrar importantes grietas en la defensa local. El talento ofensivo del germano y dos nuevas canastas de Ennis, ambas con incisivas penetraciones, mantuvieron la ventaja de los visitantes (22-24). Sin embargo, los de Ibón Navarro recuperaron el pulso, justo al cierre del acto inaugural, y voltearon el marcador con un lejano lanzamiento de Jelinek (28-25). Transcurridos 10 minutos de juego, únicamente habían anotado tres jugadores del Casademont: Ennis (12), Benzing (8) y Barreiro (5).

En cualquier caso, el conjunto aragonés necesitaba elevar, sobre todo, sus prestaciones defensivas, tras haber encajado hasta 28 tantos en el primer parcial. No lo hizo inicialmente, y Paulí sumó cinco puntos, sin apenas oposición, en los primeros compases del cuarto. Además, Jelinek acertó desde el triple poco después, también al aprovechar un importante desajuste de los zaragozanos. Al menos, Thompson y Brussino supieron combinar en ataque, con cuatro acciones muy positivas, para impulsar nuevamente a los visitantes. El alero argentino, muy mejorado con respecto a anteriores compromisos, devolvió la ventaja al Casademont Zaragoza (40-41), al cuarto de hora de partido, con cuatro tiros libres y un lejano triple perfectamente ejecutado. Por entonces, el conjunto de Sergio Hernández ya se había fortalecido atrás. Thompson, con dos mates seguidos, amplió al renta aragonesa (43-48) y acentuó aún más las dudas de los locales. 

Dylan Ennis, con un nuevo acierto desde más allá del arco, y Robin Benzing, tras otro gran balón al poste, establecieron la máxima ventaja del choque (43-53), para premiar la manifiesta superioridad de los aragoneses. Al descanso, el Casademont gobernaba el partido con autoridad (46-55), con Ennis como gran protagonista del duelo. El escolta alcanzó el intermedio con 22 créditos de valoración, fundamentados en 18 puntos, 5 asistencias y 2 rebotes en sólo un cuarto de hora. Una actuación estelar que tuvo el acompañamiento de Brussino (12 tantos), de Benzing (10) e incluso de Jason Thompson (10), muy activo y acertado en cada una de sus intervenciones.

El Casademont, firme y seguro, también fue superior a su oponente en los primeros compases de la reanudación. Hlinason, con siete puntos prácticamente seguidos, aumentó la distancia en el marcador (46-62), que se disparó hasta los 19 tantos (46-65) tras un rebote ofensivo y un certero triple de Jonathan Barreiro. El gallego también contribuyó decididamente al despegue de los visitantes. Siempre enérgico y combativo, a su habitual intensidad, arrojo y despliegue físico, y su facilidad reboteadora, el ala-pívot unió ayer clarividencia en sus decisiones y acierto en el tiro exterior. El Andorra, sin embargo, es un bloque competitivo, poco dado a las concesiones, especialmente en sus compromisos como local. Y redujo las diferencias con un parcial de 7-0 (55-67), después de buenas jugadas de Hannah y Oriol Paulí. 

Un intento de reacción que fue anulado, antes de la media hora de juego, con dos tiros libres de Nico Brussino, una canasta de Robin Benzing y otra punzante penetración de Dylan Ennis (57-73). Al término del tercero cuarto, la escuadra aragonesa mantenía una sólida renta en el marcador (65-75), a todas luces merecida.

De ahí hasta el final, el Casademont vivió algún instante comprometido, sometido por el permanente empuje de su rival, sobre todo en los primeros minutos del cuarto acto; pero al menos supo resistir con entereza y determinación, sin llegar a descomponerse como sí había hecho en sus compromisos en Fuenlabrada, Valencia y Badalona. En esta ocasión, y aunque el Andorra nunca bajó los brazos, el equipo aragonés se manejó con serenidad y templanza en los momentos decisivos de la contienda. Los visitantes por fin exhibieron tranquilidad, orden, disciplina y perseverancia en el tramo final, lo que les proporcionó cómodas ventajas -casi siempre por encima de los 10 puntos- para evitar sobresaltos. A cinco minutos de la conclusión, ya tenía prácticamente sentenciado el encuentro, tras haber completado una notable actuación (72-89). El Casademont gana crédito. Ya ha iniciado la escalada.