Un equipo al alza

"Cada día estamos mejor". Una vez consumada la victoria ante el Estudiantes, la cuarta de la temporada, el entrenador del Tecnyconta, Porfirio Fisac, subrayó el crecimiento experimentado por su equipo con el discurrir de la competición. Un bloque solidario, comprometido y enérgico, siempre presto al combate, que ha ido elevando su rendimiento en los dos lados de la pista y que, en la actualidad, se ha situado en la décima posición de la tabla con cuatro triunfos conquistados.

Un balance muy positivo para una plantilla todavía en construcción, después de haber acometido hasta once nuevas incorporaciones; y que se topó, además, con un recorrido de máxima exigencia en el tramo inicial del campeonato. Su andadura no ofreció concesiones en las primeras jornadas: cinco de sus siete primeros compromisos se celebraron lejos de su pista, y todos ellos de una dificultad manifiesta. El cuadro aragonés compitió en Vitoria, Barcelona, Málaga y Tenerife, donde se midió con cuatro de los cinco primeros clasificados; y también se desplazó a Burgos, donde esta temporada ya han claudicado el Baskonia y el Unicaja de Málaga.

Pese a todo, el Tecnyconta ha competido con carácter y convicción en la mayoría de sus compromisos. Y ahora es un equipo al alza, cada vez más cuajado y seguro de sus fuerzas, que va subsanando sus deficiencias conforme avanza el campeonato. En sus dos últimas actuaciones, la plantilla exhibió mayor compromiso y constancia, sobre todo en las labores de contención, y también supo corregir muchos de los desequilibrios que venía mostrando en sus acciones de ataque. Ante el Estudiantes y, sobre todo, contra el Tenerife, el Tecnyconta fue rápido en las transiciones, circuló con criterio el balón y encontró tiros liberados, sin apenas oposición, desde todas las posiciones de la pista. También se empleó atrás con contundencia y perseverancia, sin distracciones, con una defensa de permanentes ayudas que anuló gran parte de las virtudes ofensivas del rival.

Todo ello, además de actuar con personalidad y templanza en los momentos más comprometidos. En Tenerife, la pizarra de Porfirio Fisac resultó determinante, sobre todo en los compases finales, cuando habilitó una canasta bajo los aros de Nacho Martín y generó un lanzamiento liberado de Stan Okoye, desde el triple, en el último segundo, que desembocó en la victoria de los aragoneses.

El Tecnyconta sigue presentando altibajos en su juego, y en ocasiones es un bloque vacilante y quebradizo, con importantes fisuras, como bien retrató el partido contra el Barcelona, y también las segundas partes que completó el equipo ante el Baskonia y el Unicaja. Sin embargo, se trata de una situación lógica en una plantilla totalmente renovada que, poco a poco, se va aproximando ya a su verdadera dimensión. En este sentido, el conjunto zaragozanos se distingue por la fuerza del grupo, por la primacía del colectivo por encima de las individualidades. No hay egoísmos. Todos reman en la misma dirección. Todos hacen más cosas para el equipo que para sí mismos. Y cuando un jugador está por debajo de sus prestaciones habituales, otros emergen con fuerza para asumir la responsabilidad. "La cuestión es sumar. Unos días le tocará a uno, y otro día será el turno de otro jugador. Somos una plantilla amplía", recordó Fisac tras el compromiso del pasado domingo.

El Tecnyconta ya ha superado, a priori, el tramo más exigente de la primera vuelta, y lo ha hecho con balance esperanzador. El panorama se presenta ahora mucho más despejado en todos los sentidos: le aguardan ahora el Breogán –actual colista–, el Joventut, el Obradoiro y el Manresa.