Desde su irrupción en la ACB, el Tecnyconta siempre se había distinguido por su fortaleza como local. Ha edificado gran parte de sus éxitos en el pabellón Príncipe Felipe, un escenario exigente, prácticamente inabordable, donde sus rivales se venían manejando con una dificultad máxima. Históricamente, al abrigo de su afición, los aragoneses han obtenido victorias muy estimables, de una importante repercusión, incluso ante oponentes de mucha mayor enjundia como el Barcelona, el Real Madrid, el Baskonia, el Valencia Basket o el Unicaja de Málaga. El escenario se modificó en las dos últimas temporadas, cuando el equipo, indeciso y timorato, sin alma, se desplomó drásticamente sobre la pista y a punto estuvo de consumar su descenso a la Liga LEB. Sin embargo, el conjunto de Jota Cuspinera ha recuperado este año sus señas de identidad y ahora es, de nuevo, un bloque sólido y competitivo en sus actuaciones en casa, donde ha capturado el triunfo en tres de los cuatro compromisos disputados: frente al Andorra, el Gipuzkoa Basket y el Iberostar Tenerife.

La derrota, además, se produjo ante el Herbalife Gran Canaria, un sólido aspirante a los puestos de ‘play off’, tras un partido igualado que se resolvió en los compases finales y con una acentuada polémica arbitral. En este sentido, los colegiados fueron inflexibles con los aragoneses y, por el contrario, demasiado permisivos con el rival. Las desigualdades de criterio resultaron evidentes, según delataron las estadísticas del choque: el Tecnyconta cometió 28 faltas, mientras que sólo recibió 18. Y el Herbalife Gran Canaria acudió a la línea de personal en 34 ocasiones, por los 13 tiros libres que efectuaron los zaragozanos. Pese a todo, los aragoneses guardaron ambiciones de triunfo hasta el último suspiro de la contienda.

En este contexto, con el Tecnyconta fiable y seguro en su propio feudo, al cuadro de Cuspinera le sobrevienen dos citas de altura en el pabellón Príncipe Felipe. Se medirá ahora, de manera consecutiva, con el FC Barcelona y el Unicaja de Málaga, dos conjuntos de Euroliga poco habituados a las concesiones; y lo hará convencido de sus posibilidades de triunfo. Son dos partidos para soñar, por las elevadas prestaciones que está ofreciendo el Tecnyconta en la presente campaña. Por su capacidad competitiva y su inexorable fe en la victoria. Valores que no transmite únicamente esn sus actuaciones como local; los aragoneses también se han empleado con mano firme en sus desplazamientos, pese al arduo camino recorrido en el tramo inicial de la competición: jugó cuatro de sus seis primeros partidos fuera de casa, lo que representó una dificultad añadida para un equipo por entonces en pleno periodo de construcción.

Sin embargo, los zaragozanos supieron sobreponerse a todas las adversidades y aspiraron al triunfo en todos sus compromisos, con la única excepción de su partido en la pista del Real Madrid. Ahora, el primer obstáculo será el Barcelona, el próximo domingo, a las 18.00. El equipo azulgrana ocupa en la actualidad la segunda posición de la tabla, aunque a un solo triunfo del Real Madrid –actual líder–, y ha protagonizado un importante crecimiento con el discurrir de la temporada. Una semana más tarde, el Unicaja también medirá el verdadero potencial de los zaragozanos en el curso actual.