El Laboral Kutxa visita mañana la pista del CAI Zaragoza en un duelo crucial para que los vitorianos se aferren a las posibilidades de estar en la Copa del Rey.

Después de muchas jornadas al filo del alambre, los últimos triunfos baskonistas y los tropiezos de sus rivales directos les pueden meter de lleno en la lucha por pelear por un billete a Gran Canaria en febrero.

Los vitorianos llegan con seis triunfos y trece jornadas, y los maños tienen una victoria más, por lo que el vencedor en el Príncipe Felipe habrá dado un paso casi definitivo para estar entre los ocho mejores.

Será una nueva vuelta de tuerca para el Baskonia, que busca su primer triunfo lejos del Buesa Arena esta temporada y lo puede hacer precisamente en el escenario en el que logró el último, el pasado 18 de mayo.

En esa fecha los vitorianos vencieron por 75-88 y desde entonces todos los partidos lejos de su pista son sinónimo de derrota para el Baskonia.

Esta temporada ha tropezado en los seis partidos que ha jugado como visitante y ahora tiene la ocasión de hacer añicos esa aciaga racha en la cancha aragonesa.

El Baskonia acude con sus dos últimos fichajes, Darius Adams y Mike James, como nueva pareja de directores de juego que suplirán la marcha a Turquía de Thomas Heurtel y deberán acelerar su proceso de integración en la escuadra de Ibon Navarro.

El partido puede suponer también la despedida de Sasha Vujacic, que mañana podría jugar su último partido como azulgrana. El club puede ejecutar la cláusula de rescisión sobre el alero esloveno y romper el contrato que les une hasta el mes de junio.