Multitudinario adiós a Abós

Su familia y compañeros del CAI, deportistas, políticos y aficionados despiden al entrenador.

Los jugadores del CAI: Kevin Lisch (i) Pere Tomás (c) Joan Sastre (d) antes de entrar en el Pilar
Multitudinario adiós a Abós
Laura Uranga

Zaragoza ha dicho adiós a José Luis Abós en la Basílica del Pilar. La ciudad ha abierto las puertas de su principal templo para despedir a un entrenador que triunfó en otro templo, el del baloncesto zaragozano. Al multitudinario funeral han acudido su familia, encabezada por su mujer y sus dos hijos; y su segunda familia, la del CAI Zaragoza. Pero también otros representantes del mundo del baloncesto y del deporte, políticos e incluso aficionados del club aragonés.



Todos quisieron arropar a su mujer Eva Bosch, a sus hijos Javier y Paloma, a sus padres y al resto de la familia en una emotiva ceremonia oficiada por el padre Manuel Almor, Vicario General y Deán del Cabildo Metropolitano de Zaragoza. La despedida del entrenador del CAI fue emotiva desde el principio hasta el final, pero el momento más bonito, y a la vez el más duro, fue cuando su mujer leyó una carta que escribió el propio Abós antes de morir. Acompañada por los dos hijos del zaragozano, subió al altar, y sacó fuerzas de donde casi no las había para regalar a los asistentes el último mensaje de Pepelu. 


"Es muy reconfortante sentirse tan querido y respaldado por tanta gente, lo cual significa que algo hemos hecho bien en esta vida", aseguraba Abós en la carta: "Siento que me voy demasiado pronto, que me quedan muchas cosas por hacer pero también me voy con las alegrías que me ha dado la vida, que han sido muchas". 


En ese momento, pocos pudieron contener las lágrimas. Los asistentes aplaudieron durante más de un minuto las sinceras y valientes palabras de Abós, escritas en un momento tan duro, y acabaron poniéndose en pie para despedir al entrenador. 


Se vieron muy afectados los que hasta hace poco fueron sus jugadores, Llompart, Pere Tomás, Norel y Fontet. Tampoco faltaron Shermadini, quien se recupera de su lesión en Zaragoza, ni ninguno de los miembros de la actual plantilla, que ya estaban en la plaza del Pilar media hora antes de que comenzara la ceremonia. En primera fila estaban, además de sus hijos, el que fuera su ayudante y ahora es el primer entrenador, Joaquín Ruiz Lorente, junto a su segundo, Pep Cargol y el resto del cuerpo técnico, Willy Villar o el presidente del club, Reynaldo Benito.


"El recuerdo que nos ha dejado con su última carta indica cómo era como persona. Tenemos que estar contentos por haberle conocido y haber disfrutado de él", ha asegurado Benito, quien ha reconocido la dureza de estas últimas palabras para aquellos que compartieron tanto tiempo con el entrenador: "Demuestra su generosidad".




Numerosos representantes del mundo del deporte, y en especial del baloncesto, han acudido al funeral como el presidente ejecutivo de la ACB, Francisco Roca; el director ejecutivo de la Euroliga, Jordi Bertomeu, y Alberto García Chápuli (exdirector general del CAI Zaragoza), director de arbitraje de la ACB ; Rafa Vidaurreta en representación de la Federación Española de Baloncesto y el presidente de la Federación Aragonesa, José Miguel Sierra.


Los clubes españoles tampoco han querido faltar al último adiós a Abós, como el Joventut que ha estado representado por su presidente, Jordi Villacampa y por su entrenador, Salva Maldonado; el Real Madrid, con su presidente de honor, Emiliano, y el aragonés Alberto Angulo, entrenador del filial madridista, así como el Baloncesto Sevilla con José Luis Galilea y Benito Doblado, dos excaístas.


El director deportivo del Manresa, Père Romero; el Montakit Fuenlabrada con la presencia del entrenador, Luis Casimiro; el Estudiantes por medio de su jugador Nacho Martín y de su preparador Txus Vidorreta y el Valladolid mediante su técnico Porfirio Fisac estuvieron igualmente en la Basílica de El Pilar.


Exjugadores del antiguo CAI Zaragoza como los hermanos Arcega, Fernando, Pepe y Joaquín, Paco Zapata, sus técnicos Ranko Zeravika y Mario Pesquera, su presidente, José Luis Rubio, y el exjugador del Peñas de Huesca Luis Estiragués, junto al presidente del club altoaragonés, José Manuel Rincón, también rindieron homenaje al entrenador desaparecido.


También han acudido representantes del otro gran club deportivo de la ciudad, el Real Zaragoza. Ni su presidente, Christian Lapetra, ni su vicepresidente, Fernando Sáinz de Varanda, han querido faltar a la despedida de Abós. Junto a ellos estaban el entrenador, Víctor Muñoz, y su segundo, Raúl Langhi, asi como el jefe de comunicación del club, Miguel Gay, y los jugadores Pablo Alcolea y Javi Álamo. "Es una pérdida muy grande. Todos los que le conocimos le vamos a tener siempre en cuenta. Es una falta muy importante", aseguraba el entrenador del Real Zaragoza.


"La carta ha sido maravillosa. Hace falta tener mucho valor y mucha entereza para escribir eso para las personas que le quieren. Yo creo que todos nos hemos emocionado", ha asegurado el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, quien acudió acompañado por varios miembros del Gobierno municipal, como Carlos Pérez Anadón o Roberto Fernández.


"Yo voy habitualmente al baloncesto. También pasé por una situación similar, aunque con resultado diferente, y quizás por eso he sido muy sensible a este tema. Pepelu era un gran luchador y yo siempre pensé que ganaría esta batalla. Al final no ha sido así y se ha ido una gran persona", aseguraba Eloy Suárez, concejal del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza. Pero también estaban el presidente de las Cortes de Aragón, José Ángel Biel, la consejera de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Dolores Serrat, el delegado del Gobierno, Gustavo Alcalde, el concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Zaragoza, José Manuel Alonso... Sería imposible nombrar a todos aquellos que se pasaron por el Pilar para despedirse del entrenador.