Vuelta a la vida real. A la exigente rutina del día a día liguero. La Copa del Rey, celebrada el pasado fin de semana en Vitoria, es solo un recuerdo de ilusión en la memoria del CAI Zaragoza. Una experiencia positiva, a pesar de la abultada derrota sufrida ante el Caja Laboral. Por primera vez, el club rojillo, y con él su afición, pudieron experimentar la sensación de pertenecer a la elite de la ACB. Un estatus que los aragoneses quieren mantener hasta el final de temporada, disputando el 'Play-off' por el título. 

Claro que dicha ambición exige obligaciones. Entre ellas, el ser un equipo competitivo fuera de casa. Sin duda, el gran talón de Aquiles del cuadro dirigido por José Luis Abós. Los zaragozanos coleccionan cuatro derrotas en sus últimos cuatro partidos lejos del Príncipe Felipe. Dinámica que ha de cambiar este domingo en la cancha del Cajasol (12.00).

Para lograr la cuarta victoria en la carretera, los aragoneses podrán contar con todos sus hombres. Buenas noticias después de que Damjan Rudez, aquejado por una gastroenteritis a lo largo de la semana, se reincorporara a los entrenamientos el pasado jueves. El concurso de los jugadores importantes en el choque se antoja crucial, habida cuenta de la trayectoria ascendente de juego, sensaciones y resultados que presentan los sevillanos.

Especialmente, desde que cerraran el fichaje de Latavious Williams. Prácticamente nada más aterrizar en el conjunto cajista, el poste norteamericano se convirtió en el más valorado de su equipo. El contrapunto perfecto al base Tomas Satoransky, la otra pata sobre la que se sostiene el cuadro dirigido por Aíto García Reneses.

Curiosamente, el nuevo pívot de los hispalenses no es ningún desconocido para el juego interior rojillo. Especialmente para los dos 'cincos' del CAI, que han compartido vestuario con él durante la pasada campaña. Primero, Henk Norel, que coincidió en el Joventut. En Badalona, Williams cuajó una gran temporada, siendo nombrado el jugador más espectacular de la Liga Endesa. Posteriormente, el norteamericano emigró a la República Dominicana para jugar en verano. Una aventura en el Metros de Santiago en la que también estaba enrolado Joseph Jones. Caminos entrecruzados que convergen en San Pablo.

Desde el punto de vista histórico, el Cajasol no es un mal rival para levantar el vuelo. No en vano, de las siete veces que ambos conjuntos se han enfrentado, en cinco ocasiones la victoria ha caído de lado aragonés. Aunque, lamentablemente, las dos derrotas sufridas se han producido en suelo sevillano. Otra tendencia a romper en un partido destinado a fortalecer a los zaragozanos de cara al tramo final del curso.