Estos días, las playas abarrotadas de bañistas procedentes de todos los puntos de la geografía española y del mundo hacen 'olvidar' a estos afortunados el calor sofocante que invade la Península. No hace tanto tiempo, estos veraneantes podían disfrutar de sus equipos en 'bolos' y torneos veraniegos en alguno de los principales puntos turísticos. Pero los años en que los equipos punteros de la Primera División apenas traspasaban los Pirineos, o como muy lejos viajaban a Europa central para refugiarse del calor, han quedado atrás.

Ahora, los principales equipos abandonan el asfixiante estío español para 'disfrutar' de maravillosos lugares alejados del fragor de España. Desde la primera etapa de Florentino Pérez en el Real Madrid hasta hoy, los principales equipos del país han optado por realizar pretemporadas en lugares más exóticos y lejanos, ideales para el departamento económico de los clubes pero no tan favorables para el desarrollo deportivo.

La voluntad de los conjuntos españoles por viajar a estos países no es precisamente altruista. El Real Madrid, que ha completado una gira de 10 días en Estados Unidos, tenía previsto realizar después una gira por Corea del Sur, China y Japón en la que hubiera ingresado entre siete u ocho millones de euros por tres amistosos.

Finalmente, el criterio deportivo impuesto por Mourinho obligó a la entidad a cambiarla por una concentración en Europa. El caso del Atlético también es llamativo. El campeón de la Liga Europa viajó a Tailandia para disputar un encuentro frente a un combinado de estrellas de la liga local.

El problema para los clubes del viejo continente es que ya no vale cualquier cosa, no sirve llevar a los jóvenes del filial para que den la cara frente a los expectantes equipos rivales. Ahora, los organizadores, como pagan, y bien, (por ejemplo cuatro millones de euros al Barcelona por dos partidos), exigen que jueguen los mejores, los Cristiano y Messi.

El caso del '10' azulgrana y el encuentro del pasado 4 de agosto, ante el 'K-League All Star', es uno de los más llamativos. Un día antes del choque, Guardiola afirmó que no iba a jugar por no estar en condiciones físicas. Cuando los promotores del encuentro conocieron la noticia, se reunieron con el Barça y amenazaron con cancelar el partido si la estrella argentina no participaba. Como el objetivo de esta gira no es precisamente deportivo, y 'la pela es la pela', Guardiola acabó introduciendo al delantero en el partido.

Torneo liguero en Asia

Este interés creciente por el mercado asiático ha llevado a los responsables de la Liga a estudiar la posibilidad de adelantar el horario de algún partido cada jornada. Con esta medida se podrían celebrar encuentros a las 15.00 y, al igual que ocurre en la Premier League, estos choques podrían ser televisados en horario de máxima audiencia en Asia, donde existe una audiencia potencial de más de 1.000 millones de personas, algo muy beneficioso para los intereses económicos de los clubes.

A esta medida hay que sumar que Francisco Roca, director general de la LFP, anunció a finales de julio la creación para el próximo año de un torneo que enfrentará a tres equipos españoles y uno asiático, en un país por determinar del lejano oriente. La fascinación por el deporte del balón ha propiciado que las grandes fortunas vean el fútbol como una inversión. Y poco a poco, el emergente continente asiático está acaparando la atención de los máximos responsables de los clubes europeos.