¿Ascenso por soborno?

Con el escándalo del Hércules de Alicante como telón de fondo, el Gobierno Español pidió ayer a la Federación Española de Fútbol (RFEF) que actúe si ve indicios de manipulación de resultados en algún partido. "La Federación es el organismo competente para establecer sanciones", dijo un portavoz del Consejo Superior de Deportes (CSD), dejando en claro que es Ángel María Villar, presidente de la RFEF, quien debe tomar cartas en el asunto.

El presunto caso de soborno a un portero para facilitar el ascenso del Hércules a Primera División ha ensombrecido la Liga española, cuya limpieza se halla actualmente bajo sospecha. El diario 'El País' publicó ayer que el máximo accionista del Hércules, Enrique Ortiz, pagó 100.000 euros al guardameta del Córdoba, Raúl Navas, para que se dejara anotar un gol.

"Le di 100.000 euros al portero. En el gol de Tote se tiró para el otro lado", afirma el constructor alicantino, siempre según la versión del diario. "Ortiz confiesa en una conversación telefónica con un allegado familiar que ofreció y pagó 100.000 euros a un portero (el del Córdoba, Raúl Navas, según se desprende del diálogo) para conseguir que su equipo ganara y pudiera llegar a la Primera División", devela 'EL País'.

Luis Lucio, portavoz del CSD, explicó ayer que el caso "está bajo secreto de sumario", por lo que es "imposible hacer valoraciones sobre algo que no se tiene en papel y que, simplemente, apareció como una filtración". Pese a ello Lucio reconoció que el Gobierno "está preocupado" con escándalos así, y que por eso pidió a la Abogacía General del Estado que "se interese" por el caso.

Si el CSD ve indicios de culpabilidad, aconsejaría a la RFEF que investigara el caso y, llegado el momento, dispusiera una sanción. "La Federación es la única que puede establecer sanciones y multas", recordó Lucio. El Hércules completó su ascenso al situarse tras la Real Sociedad (primera, con 74 puntos) y empatado a 71 puntos con el Levante (segundo), mientras que el Betis fue cuarto y se quedó en la categoría de plata. El Betis ya ha solicitado ocupar la plaza del Hércules en Primera, si se demuestra finalmente que hubo sobornos.

Así, la RFEF ha regresado en estos días a un escenario ya conocido, las acusaciones de arreglos de partidos. La grabación telefónica, a la que tuvo acceso el diario, está incluida en el sumario del caso Brugal, una investigación judicial iniciada en mayo de 2007 sobre una supuesta trama corrupta vinculada al negocio de la basura en el sur de Alicante.

Compra de partidos

"Las escuchas muestran cómo Ortiz dirigió cuatro presuntos intentos de compra de partidos con el Salamanca, el Córdoba, el Girona y el Recreativo para garantizarse el ascenso, que logró como tercer clasificado", añadió el diario. La nueva polémica sobre la manipulación de resultados recupera algo habitual cada verano en el fútbol español. Y el desenlace siempre fue el mismo: silencio de la federación y caso archivado. En el verano de 2008, la Real Sociedad quiso beneficiarse a raíz de una denuncia de un agente FIFA contra el ascendido Málaga, al que acusó de haber comprado dos partidos. Se apoyó en escuchas teléfonicas, como la que ayer salió a la luz.

En julio de 2009, el CSD recibió una nueva denuncia sobre una supuesta irregularidad en el registro de los capitales del también ascendido Xerez. Al igual que ahora, el Betis quiso sacar ventaja de la situación y así evitar su descenso a la Segunda División. No lo consiguió, pero este año vuelve a intentarlo con la vista puesta en Primera.