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Aragón ruge en el Mundial

El equipo Coviar Raid, con los hermanos Javier y Miguel Grasa, es la única presencia española en el Rally. Estoril-Portimao-Marrakech que arranca hoy y puntúa para el Campeonato del Mundo de Rallys Todo Terreno.

Miguel (izquierda) y Javier Grasa ya están listos para iniciar una nueva aventura con su Mitsubishi.
Aragón ruge en el Mundial
O. DUCH

En 1997, Javier Grasa se puso al frente de un Nissan de color naranja y disputó su primera Baja España-Aragón. En su ilusión arrastró al asiento de copiloto a su hermano Miguel. Ahí empezaron un idilio con el polvo, las piedras, el barro, la arena... La pasión por una afición, la competición de raids, que sintieron desde pequeños y que, con la madurez, convirtieron en realidad. Las pruebas regionales y nacionales aportaron experiencia para emprender empresas mayores: traspasar las fronteras en busca de retos más ambiciosos. Su locura deportiva les llevó el enero pasado a afrontar un mayúsculo desafío: el Rally Dakar que por segunda vez se disputaba en tierras argentinas y chilenas. El equipo Coviar Raid entraba a formar parte de la historia del automovilismo aragonés, aunque su Mitsubishi Montero DI-D no pudo regalarles una alegría y al cuarto día de competición tuvieron que decir adiós con dolor. Pero Javier Grasa es un piloto de espíritu inquieto y, superado el amargo sabor por el precipitado abandono de la cita dakariana, se embarcó en otro proyecto de calado que se inspira en la mítica prueba: el Rally Vodafone Estoril-Portimao-Marrakech.

En la aventura que empieza hoy en tierras portuguesas le acompaña Miguel. El Coviar Raid se personifica en la máquina que rugirá durante diez días en esta carrera del Campeonato del Mundo de Rallys Todo Terreno. Ambos son la única voz española, en la modalidad de coches, que se escuchará en los 3.872 kilómetros que discurren por territorio portugués y marroquí. "Es un orgullo llevar el nombre de tu tierra y de tu país en una prueba de un Mundial. Tiene mucho mérito", reconoce Javier Grasa. El Automóvil Club de Portugal (ACP) creó en 1988 el Rally de Portugal que se mantuvo hasta 2005, cuando se convirtió en el Transibérico. Este año, los promotores miraron a África y proyectaron crear una prueba diferente en el ámbito de la Copa del Mundo FIA. En su palmarés, ilustres como Jean Louis Schlesser, Carlos Sainz, Luc Alphand, Ari Vatanen o Carlos Sousa (el gran dominador con cinco).

"Se puede decir que es un mini Dakar: por el nivel de los participantes, con la presencia de los equipos oficiales (BMW, Mitsubishi); por la exigencia de las etapas africanas, que toman los mismos caminos que en la antigua carrera africana", detalla Javier Grasa. A los hermanos no les es desconocido el escenario ni la competición. En tres ocasiones han participado en el Rally Transibérico, y Marruecos es su destino invernal para entrenar. "Es un clásico que siempre ha tenido una magnífica respuesta de los pilotos. Pero estamos en tiempo de crisis y se nota", apunta Miguel Grasa. "Hemos llegado a correr hasta 182 coches, 300 pilotos en total si sumas motos y camiones. Ahora, se hace una mayor selección de las pruebas. Pese al bajón, el ambiente es uno de los mejores. Los portugueses son grades amantes de los rallys y el público estará garantizado también en Marruecos", añade Javier.

El equipo, que contará con la asistencia técnica de Ariel Jatón, recorrió ayer los más de mil kilómetros que separan Zaragoza y Estoril, punto de partida del rally que hoy vivirá su puesta de largo con las verificaciones y la ceremonia de la presentación de las escuderías. En la línea de salida, viejos conocidos de los hermanos Grasa: Carlos Sousa, Miguel Barbosa, Filipe Campos, Leonid Novitskiy, Rui Sousa, José Gameiro..., nombres que han exhibido su clase en una cita referente del Nacional de la especialidad, la Baja España-Aragón, y que han sorteado con brillantez las dunas del raid por excelencia del mundo. "Nos vamos a encontrar unas condiciones de temperatura y de terreno muy parecidas a las que existen en Suramérica, así que a muchos equipos les sirve de preparación para el próximo Dakar", señala Javier Grasa.

Tras sortear las tres etapas en Portugal -"trataremos de asegurar para no tener ningún problema con el coche ni con los rivales"-, el Mitsubishi Montero se adentrará en Marruecos: calor sofocante, pistas pedregosas, secas y duras, como en el propio desierto del Sáhara en los alrededores de Merzouga, donde las dunas del Erg Chebbi pueden alcanzar los 150 metros de altura... Cinco jornadas duras, muy duras. "Es otra película. Que Dios reparta suerte", sentencia Miguel.

El proyecto del Rally TT Portimao-Estoril-Marrakech está patrocinado por Coviar Seguros, Expotyre, Mitsubishi Motors, Automóviles Nicolás, Rótulos Peinado, Talleres Sánchez, TDF, EIMER, Euroibérica, RalliArt, Eimerk, Alpine Skate, Grupo Star-Viajes Vimar y Kalibo. "Queríamos sacarnos la espina con una prueba de gran nivel, en un escenario que nos encanta y rodeados de amigos", concluyen los hermanos. La meta: llegar a Marrakech el próximo 13 de junio.