'CASO LAFITA'

"Agapito y yo queremos solucionar esto"

Agapito y Lendoiro, en el palco de La Romareda.
"Agapito y yo queremos solucionar esto"
josé miguel marco

zaragoza. Precisamente Augusto César Lendoiro, uno de los hombres con quien ha librado más batallas desde que aterrizó en el fútbol, se cruzó en el primer partido de Agapito Iglesias en el sillón presidencial del Real Zaragoza. Con el 'caso Lafita' aún en los juzgados, el presidente del Deportivo de La Coruña visitó La Romareda. Cumpliendo el protocolo, Lendoiro se sentó junto a su homólogo Agapito Iglesias en el palco. Ambos se saludaron antes del partido y se desearon suerte. Tras el choque, Augusto César Lendoiro accedió a conversar sobre el clima vivido en el palco de La Romareda. El dirigente gallego explicó cómo había sido la relación con Agapito Iglesias.

"Hemos mantenido la cordialidad normal de cuando se dan unas relaciones diplomáticas. Por encima de todo está la educación. Pero hay un problema importante entre los dos clubes y deseamos que se resuelva pronto. Ocurre que no está en manos del Deportivo solucionarlo", afirmó el dirigente coruñés.

En los últimos tiempos han sido frecuentes las disputas y los desencuentros entre Real Zaragoza y Deportivo de La Coruña. El fallido fichaje de Coloccini por parte de Agapito Iglesias durante dos veranos consecutivos (2006 y 2007) inauguró las discrepancias entre ambos clubes. El defensa argentino había sido el elegido para sustituir a Gaby Milito en el eje de la defensa del Real Zaragoza. Pero Lendoiro, extenuante negociador, siempre puso obstáculos al conjunto aragonés, pese a la disposición del futbolista a abandonar La Coruña.

El historial de diferencias entre Real Zaragoza y Deportivo continuó la pasada campaña, cuando Lendoiro se negó a facilitar las salidas de Pablo Álvarez y Pablo Amo, pretendidos por Marcelino García Toral. Ambos futbolistas figuraban en un lugar destacado entre las preferencias del técnico asturiano, pero Lendoiro cerró la puerta a cualquier salida rumbo a Zaragoza.

Al mismo tiempo, Agapito enseñaba sus intenciones de repescar a Lafita. Jugando con plazos y cifras, el Zaragoza insinuó que podía hacerse ya entonces con el centrocampista. Finalmente, ese verano no ocurrió nada. Además, el Zaragoza tanteó la opción del portero Fabricio, lo que obligó a Lendoiro a mejorarle el contrato. Pero, sin duda, fue este pasado verano, con el fichaje de Lafita el último día de mercado y con una tonelada de polémica alrededor lo que ha deteriorado de modo notable las relaciones entre los clubes. Lendoiro reconoció ayer que había hablado del asunto con su homólogo zaragocista: "Hemos comentado yo y el presidente Agapito Iglesias que a ver si solucionamos el asunto cuanto antes ambas partes. Esperemos que sea pronto".

Lendoiro recalcó que "a ninguno de los dos clubes les interesa mantener esta situación", en clara referencia a las malas relaciones entre ambos clubes. De hecho, el complejo fichaje de Lafita por parte del Real Zaragoza sigue pendiente de resolución judicial, pese a que la Liga de Fútbol Profesional concediese la razón al club aragonés y permitiera a Lafita jugar con el Zaragoza tras varias semanas de incertidumbre, con el futbolista ejercitándose en solitario.

La justicia ordinaria se encargará de otorgar o quitar razones. De momento, Lendoiro se muestra ajeno a cualquier decisión: "No es un caso que dependa del Deportivo de La Coruña. Nosotros no tenemos ni el dinero ni al futbolista. Nos faltan las dos cosas", indicó entre sonrisas antes de abandonar La Romareda.