Diego Gómez no pierde el olfato goleador a sus 40 años

Con un gol de Diego Gómez en el minuto 84, que supuso el 3-0 en el marcador, el Borja sentenció a su favor la tercera jornada de liga que disputó contra el Monzón. Volvió a marcar el ariete por excelencia de la Tercera División aragonesa (Grupo XVII), quien anoto su sexto gol de esta temporada, que no ha hecho nada más que comenzar.

Porque este cotizado atacante envejece como el buen vino. A sus 40 años, tras una más que dilatada experiencia en los terrenos de juego de Aragón, continúa siendo un incombustible en ataque. Con la diana de este domingo, ya suma seis en su cuenta particular de esta temporada 2018-2019, convirtiéndose en el máximo anotador de la categoría hasta el momento por delante de Edu Silva (3), del Sabiñánigo, que es el segundo en la tabla de goleadores.

No es cosa menor la racha de Diego Gómez. Seis goles en tres partidos salen a un ratio de dos por cada 90 minutos de juego. Más del 50% de los tantos de su equipo, que suma una totalidad de 11 goles. Es la cifra más alta de los conjuntos de Tercera División en este arranque liguero, después de golear al Monzón por 3-0 en la última cita liguera o endosarle siete Villanueva en la segunda jornada, donde el delantero firmó un majestuoso póker. Cinco goles en menos de 20 minutos, entre el 71' y el 90' de la segunda mitad. Algo asombroso.

Asombroso pero no increíble, teniendo en cuenta de donde viene el autor de la hazaña. Diego Gómez viene causando sensación desde hace años. Sin ir más lejos, en la campaña pasada, donde el Borja rozó el cielo con la yema de los dedos y estuvo a un paso de ascender a Segunda División B junto al Teruel y el Ejea, el delantero metió 15 goles, una cifra corta para su bagaje, que al paso que lleva, seguramente superará.

Goles que se le han caído de los bolsillos desde que entró a la Ciudad Deportiva del Real Zaragoza en edad infantil. Su récord anotador en una temporada fue de 47 goles con el Ejea. Nada más y nada menos. Todo el mundo lo ha querido en sus filas y el clásico ariete ha dejado su semilla en muchos equipos. Pasó por el Huesca, donde metió 31, el Zamora, con un bagaje de 15 goles en 19 partidos, o en Andorra, Tarazona, Teruel... Siempre cotizando a grandes cifras, siempre en la brecha.

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