REAL ZARAGOZA

Adiós a los sueldos millonarios

El presidente anuncia la creación de una plantilla formada por futbolistas con proyección y jugadores del filial. La situación económica ofrece pocas alternativas.

Pedro Herrera dialoga con José Aurelio Gay, durante el partido del Zaragoza B, ayer en la Ciudad Deportiva.
Adiós a los sueldos millonarios
TONI GALáN/A PHOTO AGENCY

En ese paseo de Agapito alrededor de sí mismo en la jornada de ayer ante los peñistas, el presidente quiso referirse también a la construcción del nuevo proyecto deportivo. Fue un mucho que decir y poco que ofertar. Se refirió al equipo, a la confección de la plantilla para la temporada que viene: un vestuario -destacó- "con jugadores jóvenes y gente de la cantera, que puedan revalorizarse con el paso de los años".En este aspecto, Agapito Iglesias da unas pinceladas de sensatez y las mezcla con lo que fue su discurso de ayer, la obviedad. La capacidad de maniobra del Real Zaragoza es muy limitada y la única forma de actuar es la de encontrar jugadores de futuro que valgan poco dinero -promesas con proyección, diamantes por pulir- para garantizar la estabilidad deportiva y poder después sacarles un rendimiento económico. "Voy a volver a lo antiguo", reconoció al advertir de su apuesta por la juventud. "No vamos a fichar más jugadores veteranos", añadió. "Que nadie piense en grandes fichajes durante las próximas 3 o 4 temporadas, es tiempo de austeridad", redondeó su teoría.

El gesto de Agapito, condicionado sin duda por la situación, tiene un buen puñado de perfiles comprometidos. De momento, es preciso conocer quién capitaneará la plantilla y, sobre todo, quién se va a hacer cargo de esa tarea. No parece que esa labor se les pueda encomendar a quienes conforman el reducido grupo de hombres de confianza del propietario del Zaragoza: su gestión en la confección del vestuario en los últimos años no recomienda entregarles esa tarea. Más bien, genera muy serias dudas. Por mucho que el presidente se ocupe de entregarles el espaldarazo de su confianza.

La única alternativa

Tampoco la gestión de la Ciudad Deportiva merece singulares elogios. A pesar de la buena voluntad de Agapito -que solicita ahora el compromiso de la cantera-, salvo contadas excepciones, el filial no es un semillero habitual de jugadores para el primer equipo, algo que sí ocurre con naturalidad en otras formaciones. Además, el empate del Zaragoza B ante el Getafe B privó ayer al conjunto de Garitano de un salto de categoría que se antoja imprescindible. Sobre el papel, la apuesta de Agapito es la única alternativa posible. Con más de un centenar de millones de euros de deuda reconocidos -reconocidos- resulta ya imposible acudir a otros mercados. El problema es cómo separar el oro de la arena. Y en esa tarea el Zaragoza no ha estado muy atinado hasta ahora.

Pero no es de los fichajes el único frente que complica la situación económica: hasta que no resuelva el contencioso abierto con el ex entrenador Marcelino García Toral, el conjunto aragonés no puede inscribir jugadores. Y queda, claro, la espada de Damocles del caso Matuzalem, con cerca de 13 millones de euros del litigio que el cuadro aragonés mantiene con el Shakthar. Así que el panorama no invita a esos dispendios que han marcado la etapa de Agapito al mando de la entidad blanquilla.

No ha sido el equilibrio económico el punto fuerte en la gestión del presidente. Desde su aterrizaje, con la llegada de Aimar y D'Alessandro, la entidad llevó a cabo una política de desembolsos económicos y de salarios desorbitados que ahora pasan factura al Real Zaragoza. El reto que tiene ahora planteado el presidente es la confección de un equipo competitivo con un impresionante recorte de los recursos económicos.

¿Y a quién se lo encomienda? Si él mismo siguiera su propio criterio, debería ser José Aurelio Gay quien comenzara a trabajar en la elaboración de ese proyecto. Porque es el técnico que, sobre el papel, cumple con los criterios que él mismo se ha marcado: la promoción desde la cantera sin un importante desembolso. Ahora bien, lo que decida Agapito, la interpretación de sus propias palabras, es siempre un pozo de sorpresas. Ya se ha anunciado que a lo largo de esta misma semana se conocerán las primeras pautas de actuación.