La salida se realizó desde la Plaza de las Torres WTCZ a las 10.00 a intervalos de treinta segundos entre cada atleta dado que se trata de una prueba contrarreloj.

Los participantes ascienden los 17 pisos de la citada torre que totalizan 457 escalones.

Según Jesús Arroyo, de la Asociación para las Naciones Unidas de España (ANUE) y que organiza esta prueba, las características de la carrera hacen que puedan participar en ella no solo los atletas más preparados sino también atletas populares, ciclistas o andarines o marchadores, ya que la estrategia y la dosificación de esfuerzos son los que al final marcan los tiempos.

Las dos torres del WTCZ alcanzan veinte plantas sobre la calle y 83 metros de altura.

ANUE promueve a través de la organización de pruebas deportivas la recuperación del Patrimonio Inmaterial relacionado con el deporte, la realización de Proyectos de Cooperación y, en todos los casos, la labor de sensibilización con nuevos eventos en los cuales poder exponer el trabajo que se está desarrollando en diferentes países del mundo.

La Carrera Vertical WTCZ está hermanada con la Marcha Senderista de Montaña al Ibón de Plan, presentada también hoy conjuntamente con la carrera, que es una andada especial por el entorno por donde discurre y por el desnivel tan pronunciado que tiene, mil metros.

Estas dos pruebas unen la tradición y el paisaje exclusivo del Pirineo (Valle de Gistau) con la modernidad y la visión aérea de Zaragoza desde las torres WTCZ.