El Club Ciclista Ebro, uno de los referentes de este deporte en Aragón, mira atrás con orgullo. A lo largo de 2008 conmemora sus 75 años de vida deportiva, un proyecto consolidado y fructífero, y un club fundamental para entender el ciclismo en Aragón. La entidad llevó a cabo el pasado fin de semana una cena conmemorativa para celebrar el aniversario.

Nacida en el año 1933, la entidad deportiva guarda en su palmarés conquistas ilustres: ahí están los títulos nacionales de Adolfo Bello, Alberto Roca y Alfredo García, en la modalidad de tándem. O el subtítulo, con la selección aragonesa, del propio Bello formando equipo con David Cañada y Antonio Gracia.

El empeño por sacar adelante iniciativas vinculadas al ciclismo queda de manifiesto en su prueba cicloturista de referencia, la Ruta del Vino, que va camino ya de la treintena -esta año ha cumplido 28 ediciones-.

Y, al mismo tiempo, en la organización de las etapas que discurren en España de la Vuelta a los Pirineos, que se ha convertido -junto a la nueva Vuelta a la Comunidad Aragonesa- en la cita ciclista de mayor relieve que se pone en marcha en nuestra comunidad. Y es que la pérdida de la tradicional Vuelta a Aragón señala a las citas de aficionados como las únicas de referencia en el calendario.

El Ebro ha asumido la organización del Campeonato de España de Bomberos y el del Mundo, que se celebró hace unos años en Zaragoza.

Y en el ámbito competitivo, destaca la puesta en marcha de equipos como Utifer, Alco o Mármoles Garbel.

Entre los distintos actos de celebración figuran una exposición y diversas conferencias sobre cuestiones vinculadas al ciclismo.