Acostumbrado a reinar en las calles de las principales ciudades del país, Carlos Mayo ha hecho las maletas y ha viajado a Estados Unidos con un objetivo claro: ofrecer su mejor versión e intentar rebajar su mejor marca personal. El aragonés disputará la prueba de 10.000 metros, la misma que el pasado mes de abril le coronó como campeón de España. Mayo competirá este próximo domingo 17 de abril, una fecha que supondrá su debut en un Mundial absoluto.

Se trata del único representante aragonés que compite en el Mundial de atletismo de Oregón, que arranca este viernes y que se prolongará hasta el próximo día 24. En total, la delegación española está compuesta por 56 atletas, la tercera cifra más alta de la historia en este campeonato que empezó a disputarse hace 39 años. Son 18 deportistas más que en la pasada edición de Doha (2019) y el mismo número que los presentes en Londres (2017).

A pesar de que son muy pocos los españoles que ya saben lo que es competir en Eugene, curiosamente el zaragozano Carlos Mayo es uno de ellos. Esta ciudad, situada en el estado de Oregón, acogió el Mundial sub-20 en 2014. Y ahí estuvo un prometedor atleta aragonés que, ocho años más tarde, se ha ratificado como una de las referencias del atletismo nacional. En aquella cita estuvieron también Mario García, Ignacio Fontes, Diego García, Fátima Diame, Laura García y María Pérez. Todos ellos repetirán este 2022 en territorio americano.

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Mayo lleva ya más de dos semanas en suelo estadounidense preparando a conciencia una de las citas más esperadas del año para él. Para tratar de combatir las altas temperaturas, se esperan alrededor de 27-30 grados a la hora de la carrera, el zaragozano viajó junto a gran parte del equipo de marcha para realizar una pequeña concentración y adecuarse al terreno y a la climatología adversa. Dobles sesiones de entrenamiento, tres días de gimnasio a la semana, entrenamiento en cuestas, tiradas largas, trabajo explosivo…

Todo para llegar a punto a la prueba de 10.000 metros. Mayo es consciente de la dificultad de la competición, donde se verá las caras con rivales de gran entidad: keniatas, etíopes, ugandeses son los grandes favoritos al título, mientras que el aragonés confía en ofrecer su mejor versión, intentar hacer marca personal e intentar ocupar la zona noble de la carrera.

Al margen de los imponentes atletas africanos, entre los europeos destacan los nombres de Crippa, Kimeli o Gressier. Deportistas que han competido junto a Mayo en varias pruebas y que el aragonés conoce bien.