deporte en verano

Cómo evitar el aumento de las temperaturas frene el rendimiento deportivo

La repentina subida de las temperaturas estos días puede afectar a la condición física a la hora de hacer deporte.

Entrenar en verano puede hacerse cuesta arriba debido a las altas temperaturas.
Entrenar en verano puede hacerse cuesta arriba debido a las altas temperaturas.
iStockphoto

El calor ya está aquí y ha llegado de manera repentina. Los termómetros ya marcan temperaturas por encima de los 30 grados y el cambio de armario ha pillado a muchos y muchas desprevenidas. Aunque todavía no es verano, lo parece y con el cambio tan brusco de temperatura el cuerpo necesita adaptarse, por lo que es normal sentir algo más de cansancio o de falta de concentración estos días. 

Una actividad cotidiana que se ve afectada por el calor es la práctica de deporte. Las subidas del mercurio merman la capacidad deportiva y lastran el rendimiento, sobre todo si no se está preparado para afrontar estos 30 grados (por otro lado, tan esperados). Así que toca sacar las mallas cortas y las camisetas de tirantes para salir a entrenar y, además, recordar algunos consejos esenciales para que el calor no juegue una mala pasada a la hora de entrenar. 

La Federación Española de Actividades Dirigidas y Fitness (FEDA) recuerda cómo se debe entrenar en estos días de más calor.

  • Beber más y adaptar la alimentación. Con las altas temperaturas el cuerpo pierde más agua, por lo que es importante mantenerlo hidratado aumentando la ingesta de agua y alimentos con alto contenido hídrico. Por el contrario, es mejor evitar bebidas alcohólicas o con cafeína, que favorecen la deshidratación.
  • Evitar las horas de más calor del día. Es importante evitar el tramo comprendido entre las 12.00 y las 17.00, sobre todo si se entrena al aire libre o en salas sin un buen aire acondicionado. En esas horas es cuando mayores grados se registran. Es más recomendable llevar a cabo tu entrenamiento a primera o a última hora del día.
  • Elegir la ropa adecuada. Utilizar prendas ligeras y transpirables y de colores que no favorezcan la absorción de calor. También es aconsejable protegerse con gorras o gafas de sol.
  • Prestar atención al calzado. Durante la época de calor es aconsejable que este sea transpirable.
  • Adaptar el ritmo. Si el calor es elevado y el cansancio o el esfuerzo que hay que hacer es mayor, lo mejor será escuchar al cuerpo y adaptar el ritmo. 

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