guerra rusia-ucránia
La guerra impacta de lleno en el mundo del deporte
La Euroliga suspende los partidos de los equipos rusos tras cancelar el Barça su viaje a San Petersburgo, que perderá la final de la Champions prevista para el 28 de mayo.
El ataque de Rusia a Ucrania ha impactado de lleno en el deporte mundial profesional, especialmente en el fútbol, con la final de la Liga de Campeones prevista en San Petersburgo para el 28 de mayo, y en el baloncesto, con tres primeros partidos de la Euroliga con representación de equipos rusos suspendidos este jueves, después de que el Barcelona decidiese cancelar su viaje a la ciudad natal de Vladimir Putin. La Euroliga suspendió este jueves no solo el encuentro Zenit de San Petersburgo-Barcelona de este viernes, sino también el Baskonia-Unics Kazán y el Bayern de Múnich-CSKA de Moscú, que debían haberse disputado este mismo jueves.
Como consecuencia del conflicto bélico, el Barcelona tampoco disputará el domingo su partido de la máxima competición continental en la capital rusa frente al CSKA, aunque la Euroliga aún no hizo oficial su suspensión. La organización de la máxima competición continental anunció la suspensión del Bayern-CSKA a las 17.45, tan solo una hora y cuarto antes del inicio de dicho encuentro en Múnich, junto a la del Baskonia-Unics, cuyo comienzo estaba fijado para las 20:30 horas en el Buesa Arena de Vitoria.
Antes de que el Barça, con un vuelo programado para este jueves a las 14:30 horas, decidiese no desplazarse a San Petersburgo, la Euroliga se limitó a asegurar que "continuará con el calendario de competición programado a menos que la integridad de todos los equipos participantes esté en riesgo y/o existan decisiones gubernamentales que impidan que se celebren partidos en circunstancias normales". "Los 18 clubes participantes de la Euroliga se reunirán mañana (por este viernes) para analizar más a fondo el curso de los acontecimientos y tomar las medidas necesarias, si es preciso", añadió la organización del torneo, que reaccionó muy tarde para adoptar sus primeras decisiones contra los clubes rusos que participan en la competición.
También la UEFA, que condena "enérgicamente la actual invasión militar rusa en Ucrania", reunirá este viernes a su Comité Ejecutivo y tomará decisiones contra el país liderado por Putin, entre ellas, privar al Gazprom Arena de San Petersburgo de la final de la Liga de Campeones 2021-2022. A pesar de que el consorcio estatal ruso Gazprom patrocina la Champions League desde 2012 y tiene un gran poder económico, la guerra y las presiones de la Unión Europea obligarán a la UEFA a retirar la organización de la final a San Petersburgo y desplazar el partido por el título a otra sede. Las ciudades favoritas a la final de la Champions son Londres (Wembley) y Múnich (Allianz Arena), designadas para los partidos decisivos de la competición en 2023 y 2024, respectivamente. «Como organismo rector del fútbol europeo, la UEFA trabaja incasablemente para desarrollar y promover el fútbol de acuerdo con los valores comunes de Europa, como son la paz y el respeto a los derechos humanos», destacó este jueves el organismo que preside Aleksander Ceferin.
El Schalke retira el nombre de Gazprom
"Estamos tratando está situación con la máxima seriedad y urgencia", añadió la UEFA, que dice compartir "la importante preocupación de la comunidad internacional por la situación de seguridad que se desarrolla en Europa". El Schalke 04, que ahora milita en la segunda división alemana, ya anunció este jueves que retirará de sus camisetas la publicidad de Grazprom, su principal patrocinador, mientras que en Inglaterra, el Manchester United, según desveló el 'Daily Star', cancelará su acuerdo de patrocinio con la aerolínea rusa Aeroflot.
Con el deporte suspendido en Ucrania al haberse decretado la ley marcial en este país durante un mes, también está en el aire la disputa el 24 de marzo del partido de selecciones de fútbol entre Rusia y Polonia -que se niega a jugar en el país exsoviético-, de repesca para el Mundial de Catar. También la eliminatoria de Copa Davis entre Ucrania y Barados ha sido trasladada a Turquía, mientras que el partido de rugby entre Georgia y Rusia previsto para el domingo en Tiflis ha sido cancelado.
En el caso del Mundial de Fórmula 1, Rusia debería albergar el GP de Sochi en el mes de septiembre, y el primer piloto que ha manifestado públicamente su rechazo a competir allí es el alemán Sebastian Vettel. "No debo ir. Es un error correr allí y lo siento por los inocentes que van a perder la vida por motivos estúpidos y un liderazgo extraño y loco", ha sentenciado el piloto germano en alusión a Vladimir Putin.
