juegos paralímpicos de tokio
El turno de los aragoneses María Delgado y Sergio Ibáñez en los Juegos Paralímpicos de Tokio
La nadadora compite en la madrugada del viernes en los 400 metros libre (3.46) y el judoca lo hará en la categoría de -66 kilos (2.30).
Dos deportistas aragoneses se estrenarán en la madrugada de este viernes en los Juegos Paralímpios de Tokio. Se trata de la nadadora María Delgado, quien participará en la prueba de los 400 metros libre, a las 3.46; y del judoca Sergio Ibáñez, quien compite en la categoría de -66 kilos a partir de las 2.30. Los dos acuden a la cita con las máximas ambiciones, tras haber ofreciendo un rendimiento sobresaliente en sus respectivas disciplinas en las últimas temporadas.
Para Delgado es su segunda participación en unos Juegos Paralímpicos, después de haber estado presente en Río de Janeiro, en 2016, y con muy buenos resultados: la zaragozana regresó entonces con dos medallas de bronce en su haber (100 metros espalda y en 50 metros libre), y ahora opta a subirse nuevamente al podio. Competirá esta madrugada en los 400 metros libre, a las 3.46, y menos de siete horas después –a las 10.06 de este viernes–, afrontará la prueba de los 100 espalda.
Delgado ha sido cuatro veces medallista en Campeonatos del Mundo (2015, 2017 y 2019), 10 veces medallista en Campeonatos de Europa (2014 y 2021), y ha conseguido seis récords de España absolutos en piscina de 50 metros, y dos récords del mundo en piscina pequeña. Además, ha sido reconocida con la medalla de Bronce de la Real Orden del Mérito Deportivo.
Por su parte, Ibáñez sí participa en unos Juegos Paralímpicos por primera vez en su carrera. El deportista de Alagón, del Judo Club Zaragoza, compite en la categoría de -66 kilos con una discapacidad visual del 78%, y ha sido medallista en un Campeonato de España absoluto, algo que nadie con discapacidad visual había conseguido antes.
Por su parte, la delegación española conquistó en la jornada inaugural de los Juegos sus dos primeras medallas, ambas en el Centro Acuático, donde Miguel Luque y Toni Ponce se colgaron sendas platas. El primero en subir al podio fue Luque, quien, a sus 44 años, llegó segundo en los 50 metros braza, clase SB3 de discapacitados físicos, y amplió a siete metales su particular colección de medallas en unos Juegos Paralímpicos. Por delante de Luque solo estuvo el ruso Roman Zhdanov, quien ganó con un tiempo de 46.49, estableciendo además un nuevo récord del mundo en la distancia.
La segunda medalla española de la jornada fue para Toni Ponce, que en los 200 metros estilos de la clase S5 de discapacitados físicos subió al segundo cajón por detrás del italiano Francesco Bocciardo, plusmarquista mundial de la distancia y que refrendó su condición de favorito con un dominio incontestable. La medalla de bronce fue para el brasileño Daniel Dias, que ya suma 25 preseas.
En esa prueba destacaron otros nadadores españoles. Luis Huerta, de 20 años, finalizó cuarto en su debut en unos Juegos Paralímpicos, y Sebastián Rodríguez, el más veterano con 64 años, volvió a demostrar su incombustible fortaleza para acceder a la final y quedar octavo. Jacobo Garrido fue quinto en los 400 metros libres clase s9, mismo puesto y misma prueba que la barcelonesa Nuria Marqués, que también obtuvo un diploma, como lo hizo el valenciano David Levecq, octavo en los 50 metros estilo libre clase S10.
