hockey hierba

Hermanos campeones

Guillermo y Begoña García han conquistado la liga masculina y femenina de hockey hierba con el Club Campo Villa de Madrid. Para el primero, es el broche de oro a una dilatada carrera. A Bego le aguarda un futuro apasionante, con los Juegos de Tokio en el horizonte. 

Los hermanos García, Guillermo y Begoña, posando en el campo Josep Marqués de Terrassa.
Los hermanos García, Guillermo y Begoña, posando en el campo Josep Marqués de Terrassa.
Heraldo

Los Fernández Ochoa en la nieve, los Sánchez Vicario en el tenis, los Gasol en el baloncesto, los Márquez en el motociclismo… y los hermanos García en hockey hierba. Guillermo y Begoña, zaragozanos de nacimiento y formados en el colegio Antonio Machado-Honigvogel, acaban de proclamarse campeones de liga con el Club de Campo Villa de Madrid. Un doblete histórico y de gran significado para la familia.

A sus 34 años, Guillermo García pone punto y final a una dilatada trayectoria con este título, con una temporada para enmarcar en la que su equipo, donde milita el también aragonés Andrés Mir, ha conquistado su primera liga masculina. El Club de Campo derrotó al Atlético de Terrassa (3-6) el pasado domingo, convirtiéndose, además, en el primer equipo no catalán que gana el campeonato nacional.

Solo unas horas antes, en el mismo escenario, en el campo Josep Marqués de Terrassa, su hermana Begoña había conquistado su tercera liga. A sus 25 años, la pequeña de los García atraviesa el momento más álgido de su carrera. Ha terminado la temporada como máxima goleadora y ha sido nombrada mejor jugadora del torneo, reconocimientos individuales que ella achaca al buen “rendimiento general” del equipo y al hecho de jugar de delantera.

“Nos costó arrancar porque, a causa de la pandemia, veníamos de un periodo largo de inactividad; pero en la segunda vuelta mostramos nuestro mejor nivel. Aunque perdimos la Copa, en la liga conseguimos resarcirnos”, explica Begoña García, que anteriormente ya había cantado el alirón con este mismo equipo, con el Club de Campo Villa, y con el Complutense Hockey Madrid.

Es el título más especial. Por la forma en que llegó (marcador apretado de 2-1 contra el Júnior, con gol suyo incluido) y porque lo viví junto a mi hermano, que poco después saboreó la gloria también”, añade Bego, a las puertas de un verano tan ilusionante como intenso con la selección española. Ayer inició una concentración de 12 días en Valencia; el 18 de mayo partirá hacia Holanda para preparar el Europeo que se disputa entre el 4 y el 12 de junio; y después llegarán los Juegos de Tokio, su segunda olimpiada tras la de Río de Janeiro.

Se vienen meses apasionantes”, adelanta la internacional española, sobre un futuro alejado de la tranquilidad que ahora busca su hermano. “El hockey de primer nivel ha terminado para mí. Es una decisión que ya había tomado y, por suerte, ha tenido la mejor rúbrica posible. Ganar mi primera liga en Terrassa, en un campo histórico y en presencia de mi hermana, es algo que jamás olvidaré”, recuerda Guillermo, que a partir de ahora colaborará con la escuela del Hognivogel en Zaragoza.

“Seguiré ligado al deporte pero no de forma profesional. Aportaré lo que pueda para que los chavales aprendan, aunque con una implicación menor que la de estos años”, completa un jugador que desempeñó la mayor parte de su carrera en Bélgica, donde ganó varias ligas regulares y llegó a disputar Copas de Europa.

Fueron años increíbles, pero no se pueden comparar con este último título de liga con el Campo Villa. Decir adiós de esta forma, con el doblete del club y al lado de Bego, ha sido muy especial”, finaliza, emocionado, Guillermo García.

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