El CV Teruel, diezmado por las lesiones para afrontar las semifinales

El CV Teruel tendrá que superarse a sí mismo para afrontar las semifinales de la Superliga, que arrancan este sábado, con el Unicaja como rival, en un partido en Almería a las 12.00 y continúan con dos encuentros –el segundo solo si es necesario el desempate– en la cancha turolense de Los Planos los días 10 y 11 de abril. La plantilla naranja no tendrá entre sus filas al colocador Milan Jovanovic, que se ha roto el menisco entrenando y ha de someterse a una intervención quirúrgica que lo aleja de la pista para lo que queda de temporada. Tampoco es seguro que juegue este fin de semana el receptor Jordi Ramón, que también está tocado, si bien, ante la duda, viajará a Andalucía a la espera de poder sumar esfuerzos con sus compañeros en la eliminatoria.

Con estas dificultades, los turolenses tienen ante sí un partido histórico en el que se verán las caras con el que ha sido durante años su rival más duro. No es una cancha fácil la de Almería, como ha destacado este jueves el entrenador de la escuadra naranja, Miguel Rivera, quien ha explicado que los suyos encontrarán al otro lado de la red a un equipo con muchas posibilidades de cambio de jugadores y eufórico tras haber logrado dar la vuelta al marcador en los partidos de cuartos de final, y por los pelos, contra Soria. "Unicaja se siente en la cresta de la ola y querrá hacer valer su fortaleza en casa, algo que lo convierte en un equipo especialmente peligroso", ha advertido el preparador.

Pero también está con la moral bien alta el cuadro turolense, que supo remontar frente al Manacor y llevarse la victoria el pasado fin de semana. "Solo pensamos en ir a Almería a ganar para dar otra alegría a la afición", ha dicho Rivera.