Atravesar España corriendo en plena pandemia

Desde el Cabo de Creus hasta Isla Canela. La península ibérica, de este a oeste, corriendo. Un desafío deportivo sin precedentes en España, que se va a desarrollar en plena pandemia. ¿Cómo? Gracias a una iniciativa del club Pigeons Runners que consiste en que distintos grupos de corredores recorran sus provincias sin saltarse los límites territoriales y entreguen el relevo a los siguientes.

El reto, denominado ‘Ranzru’, arrancará este sábado y finalizará nueve días después, tras recorrer 1.500 kilómetros por Gerona, Barcelona, Lérida, Zaragoza, Guadalajara, Madrid, Toledo, Ciudad Real, Córdoba, Sevilla y Huelva, donde está previsto que el último corredor llegue con la puesta de sol del 14 de marzo, misma fecha en la que en 2020 se decretó el estado de alarma.

Un total de 160 corredores serán los encargados de ir pasando el relevo, y cada territorio tendrá uno o varios capitanes que se encargarán de coordinar la logística. Víctor Gené y Guillermo Gasca son los seleccionados para organizar la carrera a su paso por Zaragoza, que es la provincia que presenta el itinerario más largo.

Está previsto que el domingo, a las 20.00, los primeros corredores aragoneses recojan el relevo en Mequinenza y corran hasta las 23.00. Ya el lunes, habrá una jornada completa -de 6.00 a 23.00- en la que se atravesarán pueblos como Escatrón, Azaila, Vinaceite, Belchite, Letux, Azuara, Herrera de los Navarros, Romanos o Daroca. Y en la mañana del martes, está programada la entrega del relevo en Embid, en la frontera con Guadalajara.

“En Zaragoza, en total, son 210 kilómetros y 2.840 metros de desnivel positivo. Es uno de los tramos más duros del reto porque hay subidas bastante importantes. Entre Belchite y Herrera hay un trozo bastante duro y en la parte final, entre Daroca y Embid, también hay una zona con mucho desnivel”, explica Guillermo Gasca, capitán del territorio zaragozano, y recuerda que el desafío va a cumplir todas las medidas sanitarias.

“El club Pigeons Runners, con sede en Barcelona, cuenta con experiencia en iniciativas de estas características. Han hecho carreras similares en Cataluña y en Estados Unidos, donde recientemente montaron una prueba que iba desde Los Ángeles hasta las Vegas”, señala Gasca, y añade que “todo el ‘track’ será grabado con un teléfono móvil que, a su vez, hará de testigo”.

Para ello, el aparato siempre será desinfectado antes de que lo recoja el siguiente corredor. Y es que la carrera contará con un equipo de personal de apoyo que viajará en coche y cuidará tanto la salud de los participantes como el cumplimiento de todas las restricciones. “El perfil de los corredores es variado. Hay algunos que tenemos bastante experiencia en carreras por montaña; otros, después de tanto tiempo sin poder competir en carreras oficiales a causa de la pandemia, quisieron unirse a esta iniciativa que surgió por Instagram y también tiene su parte solidaria”, completa.

Un euro por kilómetro

Pigeons Runner y la comunidad de corredores que participan en el desafío han querido aportar su granito de arena en la lucha con la pandemia. Cada corredor donará un euro por cada kilómetro recorrido, y todo el dinero será donado a la Fundación #Yomecorono para la investigación de la covid. “Ranzru’ pretende explotar el lado humano del deporte y demostrar que se siguen pudiendo hacer experiencias interesantes”, concluye Gasca.