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En casa, pero lejos del hogar

Los siete futbolistas extranjeros del Real Zaragoza relatan su experiencia lejos de su tierra natal.

Shinji Kagawa posa en su casa sentado sobre un balón.
Shinji Kagawa posa en su casa sentado sobre un balón.
Shinji Kagawa Instagram

El parón de Liga debido a la pandemia del coronavirus ha supuesto un importante revés para el Real Zaragoza. Aficionados, directiva y jugadores se han visto privados, momentáneamente, del sueño del ascenso a Primera División. 47 días han pasado desde el último partido que jugaron los zaragozanos, ante el Málaga en La Rosaleda, donde Luis Suárez consiguió decantar la balanza y que los de la capital del Ebro se llevasen los tres puntos para situarse a solo dos del líder, el Cádiz.

Pero la clasificación, el ascenso y el fútbol quedaron relegados pronto a un segundo y hasta tercer plano. La Covid-19 llegó y el confinamiento en todo el país fue decretado. Quedarse en casa hasta que todo pase parece algo sencillo, pero esto también significa permanecer este tiempo lejos de los amigos, la familia y las raíces de cada uno. Lejos del hogar. Una situación que están afrontando desde hace mes y medio los siete futbolistas extranjeros de la primera plantilla del Real Zaragoza: Shinji Kagawa, Cristian Álvarez, Jawad El Yamiq, Luis Suárez, James Igbekeme, André Pereira y Dani Torres.

Cristian Álvarez, a pesar de ser todo un referente del zaragocismo y sentir la capital aragonesa como su segunda casa, se encuentra alejado de sus más allegados. "Las tecnologías ayudan mucho a mantener el contacto y estar juntos. Hablo mucho con mi familia de Argentina, con mi hijo que está en Valencia y con los compañeros", cuenta el veterano guardameta, que se encuentra confinado en su residencia de Zaragoza junto a su hermano Juan Cruz, portero del Tarazona de Tercera División.

La rutina y encontrar el orden es un aspecto importante para mantener la calma y adaptarse a la situación. Shinji Kagawa, que tampoco está afrontando este confinamiento solo, ya que está acompañado por un preparador físico de su confianza, explica que se centra en "planificar cada día y cada semana, pensando con vistas a futuro, para tener así motivaciones y pequeñas metas". El mediapunta japonés expone que "a veces es complicado estar concentrado tal y como estamos ahora: sin poder salir de casa ni saber cuándo va a acabar esta situación. Me preocupa y me siento estresado". Para hacer frente a ese malestar emocional Kagawa apunta que trata de "encontrar la forma de convertir esa ansiedad en motivación" ya que así se hace "más llevadero".

Información y entretenimiento

Al estar lejos de su lugar de origen, el nipón trata de "estar informado de lo que está pasando en Japón, siguiendo las noticias" y comentando con sus familiares "qué medidas tienen que acometer para evitar contagiarse de coronavirus". El mediapunta también apunta que aprovecha el tiempo "para leer libros o ver películas y programas de televisión japoneses". Al igual que Kagawa, Jawad El Yamiq, también trata de mantenerse al tanto sobre la situación de su país. La vida del futbolista profesional, con continuos viajes, no suele ser fácil de conciliar con la vida familiar. En este sentido, el central marroquí señala que este confinamiento es "una oportunidad para que estemos un tiempo con nuestras familias". Y agrega: "Yo paso el tiempo con mi hijo y mi mujer", aunque El Yamiq también añade: "Echo de menos a mis amigos, echo de menos los días en los que nos juntábamos ya que quedábamos todos los días y somos como una familia". El africano espera con muchas ganas el regreso del fútbol y cuenta que "algunas veces me pongo a ver los partidos que hemos jugado esta temporada en La Romareda porque echo mucho de menos esos días y ese ambiente".

James Igbekeme también se mantiene informado de la situación en su Nigeria natal y asegura que "vivir este momento es muy difícil para todo el mundo". El centrocampista reitera la importancia de tener un día a día con trabajo y organización ya que "al fin y al cabo somos profesionales y necesitamos adaptarnos a las circunstancias y ser disciplinados", y detalla que en su tiempo libre "cocino con mi pareja y tratamos de pasar buenos ratos y divertirnos juntos, leer, ver películas y a veces jugar a la Play Station". André Pereira también está aprovechando el confinamiento para evadirse de esta insólita situación a través del ocio: "Estoy jugando al FIFA, mejorando mis habilidades culinarias, en lo que me ha ayudado mi novia, y también viendo series de Netflix", pero sin perder el contacto con sus orígenes: "Las noticias de Portugal las miro casi diariamente para saber cómo están las cosas por allí. La familia es una de las cosas más importantes de nuestra vida e intento hablar con ellos y también con mis amigos".

Los colombianos del conjunto blanquillo, Luis Suárez y Dani Torres, están viviendo estos días junto a sus esposas e hijos. Ambos tienen dos. El delantero estaba atravesando su mejor temporada y en el confinamiento expone que "juega con los pequeños, veo series y películas" y respecto al contacto con el resto de sus compañeros, el ariete asegura que están "unidos en la distancia". El atacante también aconseja: "Hay que distraerse. Si te pones a pensar demasiado en lo que está pasando te puede comer la cabeza. Hay que tener buena actitud". Por su parte, Torres, de profundas convicciones religiosas, cree que esta situación es "como volver al origen de la prioridad y nos permite ver lo realmente importante". Y remata: "Es una oportunidad para disfrutar de todo el tiempo que podemos estar con nuestras familias. Lo llevamos muy bien, tengo la gran bendición de estar con mi esposa y mis hijos y este tiempo está siendo muy ameno".

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