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El montañero de Benasque Jonatan García sufre una caída en una grieta en el Everest
Sin consecuencias graves, el alpinista benasqués será trasladado a Katmandú tras caer desde 12 metros de altura.
El baracaldés y residente en Benasque Jonatan García ha sufrido este domingo en el Everest una caída de 12 metros en una grieta durante su participación en la expedición ‘AX Road to Himalaya’. Acompañado de Alex Txikon, el accidente no ha ido a mayores y ya se encuentra descansando a la espera de su traslado a Katmandú -será a lo largo del día de mañana- para las pertinentes pruebas médicas. De dichos resultados dependerá su continuidad en la aventura que tiene como objetivo el ascenso sin oxígeno embotellado a la cima de una de las montañas más altas del planeta Tierra.
Después de la llegada al campo base del Everest días atrás, García se encontraba realizando una de las rutas previas a su escalada cuando en una de dichas subidas el montañés caía por una grieta desde una escalera, provocándole únicamente rasguños por el cuerpo en consecuencia del golpe. Por suerte, la presencia de su compañero Txikon y su colaboración en dicha actividad sirvió para que el alpinista benasqués fuese rescatado y liberado del hueco sin que su vida peligrase en ningún momento.
Según su pareja, las únicas consecuencias que ha sufrido tras el accidente son quemaduras en los dedos de los pies a raíz del frío que impera en Nepal, único motivo real por el que mañana será evacuado en helicóptero desde el campo base dirección a la capital, Katmandú. Por otro lado, Jonatan García es optimista y se muestra “ilusionado” por continuar la ruta por la que tanto tiempo ha dedicado durante todo el mes de enero, aunque su participación está condicionada a los resultados que ofrezcan las pruebas a las que se someta y por supuesto al periodo de tiempo que conlleve su óptima recuperación.
La cima de la montaña Ama Dablam, Namche Bazar, Deboche o la cascada del Khumbu son algunos de los sitios por los que ellos y su equipo ya han dejado huella desde sus primeros pasos a principios de año. Y no es para menos, pues la preparación física y mental que García llevó a cabo meses atrás para aclimatarse, basada en vías con fuertes nevadas por los Pirineos y la escasa ingesta de alimentos y líquidos, se encuentra al alcance de un número reducido de deportistas.
La esperanza es lo último que se pierde, y por eso mismo desean que los trayectos realizados con anterioridad no sean los últimos sino la precuela a la escalada del Everest como colofón final e histórico para el himalayismo.
